El cambio climático, el gran desafío de Miami Beach

En entrevista exclusiva, Philip Levine, alcalde de la popular ciudad turística, explicó las medidas para mantener la ciudad a flote

Compartir
Compartir articulo
  163
163
En entrevista exclusiva, Philip Levine, alcalde de la popular ciudad turística, explicó las medidas para mantener la ciudad a flote

El cambio climático es una realidad y el año que acaba de concluir no hizo más que reafirmar algo que todavía muchos científicos y expertos de dudosa procedencia insisten en refutar como una construcción fantasiosa sin sustentos empíricos.

El 2015 pasará a la historia como el más caluroso jamás registrado y una serie de anomalías climatológicas como la inusual primavera decembrina que sorprendió al noreste de los EEUU, la cual trajo plantas florecidas en una época en la que normalmente nieva, sumado a las implacables sequías que azotaron África o las inundaciones que golpearon varias ciudades industriales de Inglaterra, no hicieron más que comprobar que los años venideros se verán marcados por sucesos que afectaran directamente la vida de millones de personas alrededor del mundo.

  163
163

Diversos especialistas afirman que gran parte de estos acontecimientos fueron producto del fenómeno climático El Niño, proceso mediante el cual el océano Pacífico ha venido expulsando enormes cantidades de calor a la atmósfera durante los últimos meses. El aumento de la temperatura, sumado a la mayor humedad ambiente, han hecho estragos con el equilibrio ambiental a nivel global.

Por si esto fuera poco, la creciente emisión de gases invernadero incrementa la periodicidad de ciertos fenómenos climatológicos extremos como fuertes tormentas y olas de calor abrasadoras. En definitiva, muchos de los hechos que gran parte de la comunidad científica más respetada a nivel mundial venía anticipando, están tomando lugar.

En este contexto mundial, ciudades rodeadas por el agua como Miami Beach ubicada en el estado norteamericano de la Florida, corren riesgo de convertirse en verdaderas Atlantis de la era digital si no se toman las medidas preventivas pertinentes de manera inmediata.

En un encuentro exclusivo con Infobae desde la "Capital de las Américas" el alcalde Philip Levine explicó en detalle las acciones que se están llevando adelante para mantener a flote al popular destino turístico que atrae a millones de visitantes al año.

"Estamos haciendo muchas cosas diferentes para combatir el aumento del nivel del mar. En primer lugar estamos elevando nuestras calles haciendo que ganen altura. Además estamos colocando bombas en distintas partes de la ciudad para poder mantener el agua fuera de las zonas habitadas. Sumado a esto modificamos los códigos de construcción para que los nuevos edificios se encuentren a mayor altura y aumentamos el alto de nuestros muros marítimos para protegernos de inundaciones en caso de una crecida" destacó orgulloso el alcalde Levine.

Para complementar las obras de ingeniería también se está llevando adelante una tarea de educación para preparar a los residentes de la ciudad ante cualquier eventualidad lo que convierte a Miami Beach en un referente a nivel mundial en lo que respecta a medidas preventivas contra el aumento del nivel del mar.

"Hemos entendido que distintas comunidades y ciudades costeras alrededor del mundo tienen una topografía distinta y diferentes problemáticas que hacen que sus "soluciones" no funcionen en nuestro caso. En definitiva lo que hemos hecho fue confiar en nuestros propios ingenieros para hacerlo a nuestra manera", señaló la máxima autoridad de la ciudad turística que se enfrenta a su mayor desafío en los próximos años y que cuenta con un lamentable historial al haber sido devastada por huracanes como el que barrió con la ciudad en 1926 o "Andrés" en 1992 que fue catalogado como "el apocalipsis de la era moderna".

"Personas de todo el mundo quieren estar en Miami Beach, ya sea por las artes, la cultura, nuestro estilo o calidad de vida. Es importante para nosotros preservar eso y asegurarnos que los residentes y turistas puedan disfrutarlo a través de las generaciones. Estoy seguro que de aquí a cien años tendremos una ciudad donde todo el mundo quiera vacacionar y vivir".