Nicolás Maduro: "Tendrán que derrocarme para aprobar una ley de privatización"

El mandatario venezolano ofreció su mensaje anual en el acto de entrega de la Memoria y Cuenta. "Quedamos dispuestos a conversar cualquier tema que sea susceptible por la paz", dijo, en alusión a la amnistía

Compartir
Compartir articulo
Nicolás Maduro rindió cuentas ante la Asamblea Nacional Reuters 163
Nicolás Maduro rindió cuentas ante la Asamblea Nacional Reuters 163

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, rindió cuentas sobre su gestión en la grave crisis económica que asfixia al país, ante un Parlamento de mayoría opositora, un acto inédito en 17 años de gobierno chavista.

Su esperada alocución, que según la Constitución debe hacer cada año a más tardar el 15 de enero, ocurrió en plena crisis institucional, desatada tras la instalación hace diez días de la nueva Asamblea Nacional.

"Luego de 17 años que se iniciara una revolución pacífica, hoy estamos llegando a un Parlamento donde, por gracia de la Constitución, la oposición ha conquistado una mayoría que aún ejerce", comenzó su discurso el mandatario venezolano Nicolás Maduro. Señaló que a pesar de las acusaciones hechas por algunos parlamentarios opositores de "haber instalado un régimen tiránico", hoy, "gracias a la Constitución", esas personas están presentes como diputados.

Frente a la Ley de Amnistía que pretende aprobar la mayoría opositora, Maduro propuso la creación de una comisión de "justicia, verdad y paz". Consideró que debe ser "presidida por un venezolano de confianza pública y que establezca las bases legales, jurídicas, para ir a un proceso de paz y que no se imponga la visión del perdón de los victimarios a ellos mismos".

También arremetió contra los gobernadores opositores: "No tienen moral para decir que han hecho una sola vivienda, ¿y van a privatizar las viviendas que hemos construido para el pueblo?". Y sentenció: "Tendrán que derrocarme para llevar al país una ley de privatización, se los digo, cuando me demuestren que un gobernador, aunque sea uno de ustedes, ha construido una vivienda los tomó en serio".

Sobre el decreto de emergencia económica, Maduro afirmó que fue decidido con "el espíritu de proteger al pueblo venezolano". Opinó que por acciones del período gubernamental chavista "se pasó de una economía rentista, agotada a una economía productiva y generadora de riquezas". Y agregó: "El pueblo quiere un Estado fuerte que ponga límites a la especulación".

"Llamo a todo el país a apoyar las acciones que esta emergencia va a activar, a la unión nacional para enfrentar esta emergencia económica para preservar la paz", dijo, quien, además, no reconoció los errores de gestión y acusó una "guerra económica" de la derecha, apoyada por Estados Unidos, para derrocarlo.

En otro pasaje del discurso, Maduro reiteró que mantendrá cerrada indefinidamente la frontera con Colombia para combatir los "mil demonios" que vienen del país vecino, y ordenó a las Fuerzas Armadas a activar un plan especial para la zona limítrofe y "que se mantenga cerrada hasta que se termine de restituir toda la vida social, económica y la seguridad de cada palmo" del territorio.

"Con el cierre de la frontera el año pasado se demostró de manera fehaciente cómo mafias delinquían a lo largo y ancho de ese territorio: mafias paramilitares de la derecha colombiana asociadas con mafias paramilitares de la frontera venezolana", señaló.

El fragor del debate en estas dos semanas llegó al punto que el presidente del Parlamento,

, debió enviar a Maduro un mensaje a través de su esposa, Cilia Flores. "

Lo recibiremos con serenidad y respeto

", le prometió.

Su asistencia estuvo en duda debido a que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) había declarado el lunes en "desacato" el Parlamento y anulado sus decisiones por haber juramentado a tres diputados opositores que, acusados por el oficialismo, están suspendidos mientras son investigados por supuesto fraude electoral.

LEA MÁS:

Pero la oposición debió retroceder el miércoles y acatar la decisión del TSJ de desvincular a los legisladores cuestionados, tras lo que el Tribunal, al que la oposición acusa de servir al chavismo, levantó el jueves el desacato y el fallo de nulidad, con lo que el presidente podía dar cuenta de su gestión ante la Asamblea.

Ese primer capítulo de la serie de enfrentamientos de poderes que se avecina, los venezolanos lo han vivido con preocupación. "Yo, de verdad, ya no sé qué va a pasar aquí. Esto sigue empeorando y empeorando y ahora menos lo van a arreglar porque se están peleando por la Asamblea", dijo a la AFP Juan Molina, un vigilante de 44 años.

 Reuters 163
Reuters 163