La Iglesia advirtió que la droga "acecha" a las fuerzas policiales y militares

Dos días después del fin de la recaptura a los prófugos del triple crimen de General Rodríguez, la Iglesia volvió a manifestar su intranquilidad por la penetración del narcotráfico en el país. Lo hizo en boca del administrador diocesano del Obispado Castrense, monseñor Jorge Candia, quien alertó sobre el impacto de la droga entre las fuerzas de seguridad.

En una carta pastoral remitida a jefes militares, capellanes y personal de las Fuerzas Armadas y Fuerzas de Seguridad, el prelado se unió a la denuncia de la Conferencia Episcopal Argentina por el avance "sin control" de las drogas y el narcotráfico en el país.

"La amenaza de la droga acecha nuestras familias y nuestras unidades militares y policiales, por eso nos sumamos a la denuncia profética que nuestro Episcopado de Argentina viene manifestando en sus documentos sobre este flagelo", subrayó el reemplazante .

Los comentarios del vicario castrense se producen en medio de las críticas y el escándalo por el mal desempeño del personal policial nacional y provincial en la fuga de los sicarios Martín y Cristian Lanatta y Víctor Schillaci, quienes durante 13 días estuvieron prófugos de la ley.

Según trascendió, Monseñor Candia ayer habló personalmente con el titular de Defensa, Julio César Martínez, y hoy espera ser recibido por la responsable del área de Seguridad, Patricia Bullrich.

Tras las advertencias deslizadas en el texto, el religioso pidió reflexionar sobre el problema de las adicciones, pero sin desviar la atención en temas que no son de "competencia" de las fuerzas armadas, como "los estudios e informaciones sobre la situación actual, la delincuencia detrás de las organizaciones narco y otros".

"La toxicomanía tiene que considerarse como el síntoma de un malestar existencial, de una dificultad para encontrar su lugar en la sociedad, de un miedo al futuro y de una fuga hacia una vida ilusoria y ficticia", manifestó.

"El incremento del mercado y del consumo de drogas demuestra que vivimos en un mundo sin esperanza, carente de propuestas humanas y espirituales vigorosas", agregó Candia.

El administrador diocesano afirmó que la comunicación y la espiritualidad son los ejes para "enraizarse un verdadero camino de prevención", al anunciar que el Obispado dará a conocer en breve un documento con orientación para la pastoral de las adicciones en el ámbito específico de las Fuerzas Armadas y Fuerzas de Seguridad.