No hubo remontada histórica finalmente en la revancha. El Barcelona había vapuleado 4-1 al Espanyol en la Ida, fue por más y lo consiguió. Con un doblete del juvenil Munir, quien primero aprovechó una buena habilitación de Lionel Messi para abrir el marcador y luego facturó tras una buena jugada colectiva en la que también participó el rosarino, los blaugranas festejaron.
Luis Enrique guardó a varios de los futbolistas considerados titulares (Javier Mascherano acompañó a su coterráneo los 90 minutos) y selló la clasificación a los Cuartos de Final de la Copa del Rey, competición en la que también figura como máximo candidato, después de que el Real Madrid fuera eliminado por la mala inclusión de un futbolista (el Atlético definirá su pase mañana).
Los Periquitos trataron de calentar el pleito, sabiendo que les iba a ser muy difícil darlo vuelta, pero ni así pudieron sacar ventajas frente a su archirrival, que casi sin despeinarse se metió entre los ocho mejores del certamen y continúan con aspiraciones a quedarse con el triplete (es potencial líder en la Liga y desandará en febrero los Octavos de Final de la Champions).
Esta vez la Pulga no pudo anotar su apellido en el marcador, pero mostró un buen nivel luego de la consagración en la gala del Balón de Oro, donde sumó su quinta estatuilla.
Estadio: Cornellá