El acusado de matar a la pareja de policías era buscado por el crimen de otro efectivo

Es conocido como "Tate" y tiene 19 años. Fue detenido horas después del doble crimen de los oficiales en Rafael Castillo. Lo buscaban por el asesinato de un sargento de la Federal el mes pasado

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Un matrimonio de policías fue asesinado por al menos tres delincuentes que les robaron el auto cuando llegaban a su casa en la localidad bonaerense de Rafael Castillo. Horas después del hecho detuvieron a un joven sospechado de participar en el asesinato.


El detenido por el crimen de la pareja es Ezequiel Yoel Miranda, de 19 años, a quien lo apodan "Tate". Sobre él pesaba un pedido de captura por el asesinato de un sargento de la Federal durante un robo en Isidro Casanova ocurrido hace poco más de 20 días.


El joven era buscado por su presunta participación en el homicidio del efectivo Luis Rodríguez (39), quien fue asesinado el 9 de agosto, cuando estaba en su auto con su novia en La Haya al 3200, en la localidad de Isidro Casanova. Allí fue sorprendido por tres ladrones que los abordaron con intenciones de robo.


Los bajaron del auto. A la mujer le quitaron un celular y un bolso. Ella se puso a correr para escapar, pero Rodríguez casi no pudo defenderse: lo acribillaron de varios disparos en las brazos, en la ingle, el tórax y la espalda. Horas después, moriría en el hospital.


Ahora, "Tate" deberá responder por los tres crímenes. Por lo pronto, Policía Científica ya realizó peritajes sobre el 206 del matrimonio de policías y halló un orificio de afuera hacia adentro y un plomo calibre 9 milímetros, probablemente disparado por alguno de los dos efectivos asesinados. Además, levantó nueve impresiones de huellas dactilares en la escena del doble crimen.


El doble crimen de Rafael Castillo ocurrió cerca de las 21:30 del martes, cuando el oficial ayudante de la policía bonaerense Sergio Fernández (29) y su mujer, la sargento Betiana Bringa (30), acababan de arribar a su casa ubicada en el cruce de Silvino Olivieri y Olegario Víctor Andrade, de Laferrere, a bordo de su Peugeot 206. Eran padres de un nene de 4 años.


Lucas, cuñado de la pareja, contó que él estaba dentro de la casa de las víctimas junto a su mujer, también Policía, cuando Bringa entró y alertó que estaban asaltando a Fernández. Beti agarró el arma y bajó corriendo con mi mujer, que estaba uniformada, y cuando apenas abrió la puerta y salió, le pegaron un tiro", relató el testigo.


"Cuando yo salgo estaban estos individuos (por los delincuentes) corriendo, con mi cuñado ensangrentado en el piso y seguían tirando y riéndose, burlándonos, y Beti tirada contra la pared", relató Lucas. "Sergio me había pedido que lo acompañara a guardar el auto, pero no sé por qué fui al baño y no con él", se lamentó.