Fútbol y refugiados: en Alemania dicen "bienvenidos"

"Welcome refugees" fue la bandera que más se vio en las tribunas del fútbol alemán durante el último fin de semana. Con ese lema, la mayoría de los equipos se sumó a la campaña contra los ataques de sectores neonazis contra los inmigrantes, que encabezó el elenco nacional.

En un video, las principales figuras de la Selección de Alemania, campeona del mundo en Brasil 2014, se expresaron en contra de la violencia y la xenofobia. Encabezados por su capitán Bastian Schweinsteiger, Jérôme Boateng, Ilkay Gündogan, Mesut Özil y Toni Kroos, exhiben carteles en los piden por la buena disposición, el respeto, la integración, la apertura y el fair play.

El combinado alemán es uno de los más cosmopolitas del mundo con futbolistas nacidos fuera del país o cuyas familias llegaron desde diferentes puntos del planeta, tales como Lukas Podolski (Polonia), Özil, Gündogan y Emre Can (Turquía); Boateng (Ghana) y Shkodran Mustafi (Albania).

"Somos personajes públicos, tenemos el deber de hacer algo contra la violencia y la xenofobia. Como uno de los países más ricos del mundo estamos en la posición de ayudar", aseguró Kroos. "Por supuesto que el tema nos concierne. Es importante para nosotros dar el ejemplo. Debemos ponernos al frente como futbolistas, como selección alemana", explicó el manager, Oliver Bierhoff.

El caso del pequeño Aylan Kurdi, el niño de tres años que apareció muerto en las costas de Turquía y cuya imagen recorrió el mundo, es uno de los 350 mil los refugiados que intentaron llegar a Europa en lo que va de año.

Alemania espera 800 mil solicitudes de asilo este año, más que cualquier otro país de la Unión Europea y el cuádruple de lo que sucedió en 2014. La mayoría proviene de Siria, seguido por Eritrea y Afganistán.

Ante esa situación el fútbol teutón decidió sumar su apoyo a la situación humanitaria y en la última fecha de la Bundesliga en los estadios se vieron banderas con la frase "bienvenidos refugiados", mientras en las pantallas de las canchas se emitieron mensajes para concientizar a los hinchas sobre este tema.

El Borussia Dortmund, uno de los equipos más grandes de Alemania y del continente, invitó a 220 jóvenes refugiados a su partido de la Europa League contra el equipo noruego Odds Ballklubb el jueves pasado.

En el club antifascista por excelencia, el Sant Pauli, de la segunda división, la bandera "bienvenidos refugiados" es habitual en sus tribunas y en los últimos días anunció un proyecto para acoger a refugiados en sus instalaciones y sus aficionados ofrecen donaciones.

En Berlín se puso en marcha el programa Campeones Sin Fronteras, un torneo exclusivo para refugiados donde reciben apoyo de los entrenadores (los únicos alemanes del sistema) para poder resolver su situación.