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La legisladora porteña, que además asesora a la candidata a gobernadora de la provincia de Buenos Aires María Eugenia Vidal, explicó cómo nació el fondo específico para atender las necesidades hídricas de la provincia. "En aquel momento se decidió un impuesto sobre naftas y GNC, cuyo destino era atender las soluciones a las inundaciones que en ese momento afectaban a la región pampeana y generar un flujo para las obras del plan maestro del Río Salado".
Este Fondo, explicó Caballero, recauda actualmente unos $200 millones mensuales. "Las estimaciones que hicimos hace ya quince años era que llevar adelante las obras hídricas para la cuenca del Salado requería unos u$s1.830 millones". Las actuales inundaciones demostraron una vez más que las obras ni siquiera arrancaron.
Alejandra Caballero: "Las inundaciones demostraron que las obras nunca se hicieron"
"Llevar adelante un plan integral para el río –señaló la especialista– lleva 15 años. Se hicieron algunas obras, pero en el 2005 una comisión llegó a la conclusión de que lejos de mejorar la situación la empeoraron, porque se hicieron por afuera del plan maestro que se había definido".
La cuenca hídrica del río Salado resulta vital no sólo para la provincia de Buenos Aires sino también para el país. Se estima que el 70% de la producción agropecuaria bonaerense está dentro de la cuenca y es el 30% de lo que se produce en el país.
¿En qué consiste el plan maestro para el Salado?, preguntó InfobaeTV.
"Si bien hacen falta 15 años, hay una cantidad de medidas de corto plazo, mientras se trabaja a mediano y largo plazo. Hay que trabajar sin prisa pero sin pausa para que los bonaerenses puedan disfrutar del recurso hídrico. Las externalidades negativas son impresionantes, teniendo en cuenta todas las pérdidas acumuladas, que exceden largamente el costo que hubiera tenido la obra. El plan maestro incluye 16 ciudades, con la construcción de reservorios, drenajes y terraplenes, como también obras viales como rejillas de escurrimiento en los cascos urabnos.
Alejandra Caballero aclaró que la modificación del objetivo del fideicomiso no arrancó durante el gobierno kirchnerista, sino en la administración de Eduardo Duhalde en 2002. "No es el único fondo que sufrió modificaciones, algo parecido sucedió con el de gasoil. Lo que pude saber sobre el destino, una parte fue a las represas de Santa Cruz y algunas obras en la provincia por afuera del plan maestro. No entiendo todavía por qué no se ejecutó aquel plan maestro financiado por el Banco Mundial".