La ballena que llegó perdida a Puerto Madero tiene un antecedente para los porteños. Hace 79 años, una ballena azul encalló a 500 metros del puerto de Olivos (Buenos Aires) y, por entonces, había consternado a las autoridades que regulaban la navegación por el Río de la Plata.
Se trató de un ejemplar de una ballena azul de 18 metros de largo por 3 de ancho que apareció en horas de la mañana el 1 de julio de 1936 con una aleta rota, pero aún con vida. Para no estorbar la navegación, el animal "fue ultimado" para no dificultar el paso de embarcaciones, según describió un ejemplar del diario La Nación del día posterior.
No obstante, ya el 27 de junio se había dado aviso que dos cetáceos habían sido avistados a la altura de San Isidro. A continuación, el artículo que ilustró el hallazgo: