"Mariposa", dos mundos cargados de deseo

La nueva película del director argentino Marco Berger se estrena este jueves y recibirá su premio en el Festival Internacional de Cine de San Sebastián. Infobae habló con su realizador y los protagonistas

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El placer, la pasión y el deseo son los pilares de "Mariposa", la cuarta y reciente película del director y guionista de cine argentino Marco Berger, que se estrena este jueves 6 de agosto en las salas porteñas. El film narra las vidas de Romina (Ailín Salas) y de Germán (Javier De Pietro) en dos realidades paralelas: en una los protagonistas crecen como hermanos que se desean y tratan de darle forma a su amor sin la consumación sexual; en la otra, son dos jóvenes que forman una extraña amistad en lugar de liberar sus sentimientos mutuos.

En estas dos historias simultáneas (pero diferentes) desnudan conflictos internos, dudas, inseguridades, deseos inhibidos, impulsos y atracciones que se van manifestando en todo el entorno. Prima la naturalidad de los personajes y sus fantasías. Ambas se unen por un común denominador: Germán desea profundamente a Romina, pero alcanzarla no le será fácil.

En el medio, se destacan las actuaciones de Julián Infantino, Malena Villa, Justo Calabria, Jorge Diez y María Laura Cal que juegan roles fundamentales para el enredo sentimental que envuelve a los protagonistas. Desengaños, mentiras, deseos cruzados le aportan intriga y naturalidad a la película: Germán está en una relación discordante con Mariela y solo quiere a Romina que a su vez sale con Bruno, quien en realidad quiere acostarse con Germán.

La homosexualidad y los deseos fluctuantes de los amantes entran en escena y plantean una disyuntiva constante en la existencia emocional de los personajes. "Una mariposa es criatura que simboliza el renacimiento y un nuevo comienzo. Su aleteo puede cambiarlo todo. Tu familia, tu futuro. Pero nada puede alterar el deseo", resume la sinopsis de este film que en septiembre recibirá un premio en el Festival Internacional de Cine de San Sebastián por mejor largometraje sudamericano en representar la defensa de las reivindicaciones y valores de lesbianas, gays, transexuales y bisexuales. El jurado del Tercer Premio Sebastiane Latino la eligió por "la minuciosa estructura de guión y montaje realizada para contar una historia de las dos maneras posibles que una decisión inicial provocaría".

Mientras rueda "Dos elefantes" - su quinto trabajo filmatográfico- Berger le contó a Infobae que "Mariposa" es su película más lúdica y que haber sido premiado "fue una sorpresa enorme". "Es un premio a mi trayectoria, a la carrera que tengo y cómo siempre encaro el tema de la diversidad. Con Mariposa creo que traje frescura", dijo el también premiado director de "Plan B" (2009), "Ausente" (con la que ganó en 2011 un Teddy Award a la Mejor Película en el Festival Internacional de Cine de Berlín) y "Hawaii".

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-¿Cómo maduraste la idea de hacer esta película?

Tenía muchas ganas de explorar otras cosas. Me gusta explorar todos los géneros. La hice después de "Plan B" que era una comedia romántica. Pensé que bueno hacer algo de ciencia ficción. Madre que se queda o rechaza un bebé y la historia de los hermanos. Desde esas columnas, le di forma y las ideas fueron saliendo. Lo único que sabía era cómo iba a terminar, lo demás fue un proceso de escritura único por un par de semanas. La estructura del guión es la misma, nunca lo modifiqué. Filmé lo que escribí. No me siento identificado para nada con el guionista que rompe papeles.

-¿Cómo la resumirías?

"Mariposa" juega con la posibilidad que existe en la gente de tener mundos paralelos. En algún momento de mi vida, como muchos, me pregunté cómo sería mi vida si hubiera hecho otra cosa, si algo hubiera cambiado en algún momento. El puntapié inicial de la película fue eso. Cuando hice "Plan B" siempre me pregunté cómo hubiera sido mi vida si hubiera decidido no estudiar cine. Y la película juega un poco de eso, con cómo sería mi vida de otra forma.

-La película tiene una alta carga pasional, de inhibiciones, represiones y dudas ¿Lo asociás con lo que pasa un poco hoy con la juventud?

No. La peli no tiene ni tiempo ni espacio. Sí habla sobre los miedos, las represiones, sobre la mentira. De todas las películas que hice, ésta es la más lúdica, más universalista. No está atada a nada. Simplemente juega con un mundo y otro paralelo, diferentes. Si bien no podemos saber qué hubiera pasado si..., se puede fantasear con eso. No hay nada que la conecte con la vida de la gente, pero sí con sus fantasías e imaginación.

-¿Por qué te surgió crear una relación amorosa entre hermanos?

"Mariposa" plantea la mentira que ellos cargan porque no son hermanos de sangre. Hay algo que está más allá de ellos. Ese deseo que se despierta no está sostenido. No es que se esté planteando el incesto, que es el deseo real y carnal de dos hermanos de sangre. Acá la mentira sostiene ese "no". Me parece que en esa historia hay algo que los supera y se plantea qué hacen con eso y cómo lo van desarrollando.

-¿Sentís que lo que sucede en tu mundo cae plasmado en tus películas?

Todo lo que me rodea me construye a mí como persona: la forma que yo tengo de ver el mundo, el deseo, la represión, las trabas sociales que encontré siendo gay desde lo familiar hasta en las amistades. La película también plantea esto: ´te gusto yo, te gusta mi amigo´, como que la gente no es clara en su discurso. Todo lo que hago y veo me construye como persona y a partir de ahí hablo. Lo que sucede en "Mariposa" se puede trasladar a cualquier cosa del mundo. La gente encuentra identificación en mi cine sobre todo en las formas: el lenguaje que utilizo, la conexión física, la forma de relacionarse y de amar.

Respecto a la elección de los protagonistas, Berger describió a Javier De Pietro y Ailín Salan como "excelentes actores" en quien confía plenamente. "Mi personaje Germán son la misma persona en dos contextos distintos. Me permití jugar conmigo mismo. Probé miradas y entendí que era un personaje podía tener las mismas sutilezas y ser el mismo. El desafío fue diferenciarlos sin que ninguno dejara de ser la misma persona", subrayó De Pietro. Por su parte, Salas confesó que su personaje Romina es "bastante cercano" a lo que es ella como persona. "Mi personaje es bastante parecido en un universo y en el otro. También a cómo soy yo en mi vida", concluyó.