Un argentino es noticia hoy en San Pablo (Brasil) tras intentar pasar por los controles aduaneros con 2.600 collares de oro escondidos en un chaleco especial que llevaba debajo de su camisa. El mismo detenido valuó las joyas –que pesan 7,2 kilos- en 250 mil dólares y reconoció que iba a venderlas en Brasil.
La oficina de la Administración Federal de Impuestos en el aeropuerto internacional de San Pablo confirmó que el hombre fue acusado formalmente de los delitos de contrabando y evasión fiscal. En tanto, las joyas serán sometidas a una evaluación para determinar su calidad y autenticidad.
El 5 de julio pasado fueron incautadas en la aduana una cantidad aún no determinada de diamantes y esmeraldas, por un valor cercano a los 1,5 millones de dólares, escondidos en fajas que un pasajero procedente de Estados Unidos amarró en sus piernas.