En el Estadio Nacional, Perú logró en los primeros minutos lo que parecía imposible en la previa: silenciar a la multitud que rebasó la capacidad de las tribunas y monopolizar la tenencia del balón en la Semifinal ante Chile, a tal punto que creó dos situaciones de riesgo contra la valla defendida por Claudio Bravo. Pero la historia cambió a los 20', con una jugada particular: a Carlos Zambrano se le fue la pierna contra la espalda de Charles Aránguiz y el árbitro José Argote no tuvo más remedio que expulsarlo.
De ahí en más, el nacimiento de un nuevo juego y un trámite simplificado para la "Roja" de Jorge Sampaoli, que debió transpirar más de lo previsto para apoderarse de la victoria y el boleto para formar parte de la Final por el título. Lógicamente, el defensor que vio el camino de las duchas antes de tiempo se instaló en el ojo de la tormenta para la prensa y los fanáticos de aquel país, aunque no eludió las responsabilidades y apeló a una dura autocrítica para reconocer su equivocación.
"Sí, claro, ahora soy el malo de la película. Así como a todos les duele, no se pueden imaginar cómo estoy yo. Soy el primero en aceptar que cagué a mi país, pero ya está", escribió el jugador del Eintracht Frankfurt de Alemania en su cuenta personal de Instagram, compartiendo su desazón por lo acontecido anoche.
Mientras Ricardo Gareca prefirió respaldarlo en la conferencia de prensa posterior al duelo con los anfitriones, Zambrano aprovechó para resaltar la labor de sus compañeros, que llegaron a igualar transitoriamente las acciones, aunque terminaron arrodillados por el bombazo de Eduardo Vargas a distancia. "Nuestro seleccionado, con 10 hombres, luchó y dejó todo en el campo. Quiero agradecer el apoyo de algunas personas en estos momentos", añadió el protagonista.
"Son entendibles las críticas y de caballero aguantar todo, así somos la mayoría de los peruanos. Quieren que todo sea perfecto. Sólo me queda agradecer a Dios por cada momento de mi vida", concluyó su catarsis Zambrano, quien obviamente deberá mirar por televisión el choque del viernes por el tercer puesto, que se disputará ante el perdedor de la llave animada por Argentina y Paraguay.