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De todas maneras, la plaza de los metales preciosos se mantiene expectante por la posible alza en las tasas de interés en los Estados Unidos y salidas de flujos de los fondos respaldados en el lingote.
El oro al contado llegó a subir hasta 1,1%, a máximos de una semana de 1.189,60 dólares la onza pero recortó el avance a 0,77%, a 1.186 dólares.
Una planeada reunión entre los líderes de Alemania, Francia y Grecia prevista para hoy estaba en duda dado que las propuestas de reformas que presentó Grecia para destrabar la ayuda necesaria y evitar una moratoria de pagos incumplieron con las expectativas, dijeron funcionarios de la Unión Europea.
Los analistas sostienen que la cotización del lingote también es impulsado por la caída del dólar, que pierde 0,3% contra una canasta de monedas, mayormente en reacción a los comentarios del gobernador del Banco de Japón que dijo que es improbable que el yen caiga aún más debido a que ya se encuentra "muy débil".
Pero un máximo de ocho meses en los rendimientos de los bonos referenciales a 10 años en Estados Unidos podría mantener al oro por debajo de la importante marca de 1.200 dólares, dijeron analistas.
para el metal. Sólidos datos en Estados Unidos -incluido un reporte del viernes que mostró un fuerte aumento en el empleo- y recientes comentarios de altos funcionarios de la Reserva Federal sugiriendo que es probable un alza en la tasas este año presionaron al oro el viernes a mínimos desde el 19 de marzo, a 1.162,35 dólares.