El enojo de Roger Federer por un fanático que le pidió una selfie

Una vez finalizado el choque entre Roger Federer y el colombiano Alejandro Falla, que terminó con la victoria del suizo (6-3, 6-3 y 6-4), un adolescente saltó a la pista de la Philippe Chatrier para tomarse una selfie sin que los miembros de la seguridad del torneo intervinieran.

"No estoy contento en absoluto", dejó en claro Federer en la rueda de prensa posterior al partido. "De golpe él estaba al lado mío. No sabía de quién se trataba y nadie ha reaccionado. No pasó nada, por lo que estoy aliviado, pero no es una situación en la que te guste estar", explicó.

"No debería pasar en una pista como esta. El terreno es nuestro lugar de trabajo y debemos sentirnos seguros", continuó Federer, que ya vivió un incidente similar el sábado pasado, cuando varios niños saltaron a la pista durante un entrenamiento.

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Federer estuvo implicado en un incidente más serio en 2009, cuando disputaba la final de Roland Garros ante el sueco Robin Soderling. Entonces un individuo entró en la pista y le puso una bandera en la cara antes de que la seguridad interviniera.

El director del torneo Roland Garros, Gilbert Ysern, acudió inmediatamente a presentar sus excusas al jugador y ofreció una rueda de prensa. Señaló que pidió al adolescente que abandonase las instalaciones y que no se ha sancionado al personal de seguridad.

"Hay claramente un pequeño agujero en la raqueta de la organización. La pista es sagrada"

"Federer está contrariado. Lo que ha pasado no tiene lugar. Hay claramente un pequeño agujero en la raqueta de la organización. La pista es sagrada", dijo Ysern, aunque sostuvo que no fue "el fin del mundo".

Desde la grave agresión a la ex tenista Monica Seles en Hamburgo, el 30 de abril de 1993, los torneos de tenis reforzaron sus dispositivos de seguridad. La estadounidense, triple vencedora de Roland Garros, fue apuñalada en la espalda durante un partido por un espectador perturbado.