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La rueda no fue tan idílica como lo muestran los números. El BCRA tuvo que emitir un comunicado desmintiendo que haya aumentado la plantilla de empleados, pero no contradijo la nota del matutino que hablaba de 200 incorporaciones incluyendo a la esposa y al hijo del titular de la entidad Alejandro Vanoli.
"Vanoli consiguió transformar al Central en una empresa familiar", era la broma que hacían los operadores en la plaza financiera que están enfrentados con la actual gestión.
De hecho, la entidad anunció que le retiraba la licencia para operar en cambios a Arpenta, cuando fue la propia entidad la que pidió la baja. Pero todo sirve para confundir y mantener al dólar por debajo de 13 pesos.
Cabe recordar que la plaza financiera había comenzado a operar con pronóstico de tormenta. Las acciones de Petrobras prolongaban al inicio su baja del día anterior. Llegaron a descender 5% hasta que llegaron mejores noticias de la bolsa de San Pablo y el papel revirtió su tendencia y cerró 0,65 por ciento arriba.
Los bancos recuperaron parte del terreno perdido
Toda la Bolsa se contagió y sólo hubo una baja, la de Edenor 0,23%. El alza más destacada fue la de Aluar con más de 3%. Los bancos recuperaron parte del terreno perdido el día anterior con alzas de algo más de 1%. YPF sumó apenas 0,21%. Al final del día, los negocios en acciones subieron a $241 millones y el índice Merval de las acciones líderes creció 0,70 por ciento.
Mercado de divisas con más movimientos
En tanto, en la plaza cambiaria todavía no se digiere el cimbronazo de una de las principales casas de cambio de Buenos Aires que no está pagando a sus clientes. Esta entidad fue arrastrada por la caída del Banco D'Andorra en Europa. El epicentro del sismo estuvo en Mar del Plata, donde la casa de cambios de una tradicional familia quedó pegada con u$s70 millones de operaciones de cable no registradas. La entidad bonaerense, en tanto, tuvo una pérdida de 25 millones de dólares.
De todas maneras, con escasas operaciones, el dólar libre sobre el final de la rueda subió 3 centavos a 12,73 pesos. Las operaciones de dólar – ahorro crecieron 3 millones a u$s16,12 millones. En lo que va del mes, con autorización de la AFIP se vendieron 450 millones de dólares.
En el Forex-MAE, la principal plaza mayorista de cambios, el monto de negocios alcanzó a u$s773 millones porque YPF liquidó casi 600 millones, de los 1.500 millones que consiguió con la reciente emisión de bonos. Además, hubo una revalorización de las reservas de 26 millones de dólares por la suba del oro y del euro.
Por YPF, las reservas volvieron al nivel del 1 de noviembre de 2013
Como contrapartida, se destinaron u$s43 millones para importación de energía; se le vendieron u$s28 millones a las armadurías de Tierra del Fuego, se le dieron u$s26 millones al Tesoro para que pague material ferroviario y se canceló deuda externa de las provincias por 10 millones.
El saldo final fue un aumento de las reservas de u$s537 millones, a u$s33.216 millones, el nivel más alto desde el 1 de noviembre de 2013. En el Mercado Abierto Electrónico (MAE), la principal plaza de títulos de la deuda, los negocios cayeron casi 40% a 945 millones de pesos.
Los bonos en dólares con legislación argentina siguieron en baja. El Boden 2015 y el Bonar 24 fueron los menos afectados porque cedieron tuvieron caídas de 0,05%. En cambio el Bonar X que vence en 2017 cayó 1,11 por ciento.
El Discount en pesos que indexa el costo de vida, fue descartado por los inversores. Su momento de gloria fue en marzo y en la primera parte de abril. Ahora casi no atrae negocios. Esta vez movió apenas 100 mil pesos y perdió 0,82 por ciento.
A través de las Lebac, el BCRA retiró del mercado más de 7.000 millones de pesos
En la jornada, la autoridad monetaria hizo una nueva licitación de Letras cuyo resultado neto final fue la absorción de 6.760 millones de pesos y 43 millones de dólares. De este modo, el stock de esos papeles en circulación se amplió a $264 mil millones y 1.641 millones en dólares.
El ambiente de inversiones sigue extraño. El momento de gloria parece haber pasado. Ahora aumentó el riesgo y no es tan fácil hacer grandes diferencias. Los inversores están más cautelosos y toman ganancias apresuradamente.