A Independiente le faltó un cambio; a Almirón entender cómo hacerlos

Al 'Rojo' le faltó una marcha más desde el pensamiento del partido para destruir el TEG al que jugó Argentinos. A Almirón un curso acelerado para dominar el arte de las modificaciones, fundamental para romper un partido cerrado. En conclusión, Independiente debe cambiar para asentarse en el peldaño donde supo jugar con nivel

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Es el técnico que debe seguir en el club. Apuesta por una idea ofensiva y eso en este fútbol lavado como un mate después de varias rondas es un gran punto a favor; eso está más que claro. Aunque últimamente, el Independiente de Almirón parece que va pasando cada vez más de mano en mano y se le empieza a sentir el gusto del agua tibia. Un equipo sin carácter, como esos verdes que pierden su personalidad y dejan flotar los palos de la yerba en el frío del líquido.


Ante Argentinos dio un paso atrás. Le faltó personalidad. Entereza para que la apuesta inteligente y disciplinada del rival no destroce los principios. Al Rojo le faltó una marcha más desde la búsqueda. Su único pretexto para romper el cero fue avasallar a un rival que se mató de risa cuando lo quisieron pasar por encima de matón. El buen juego se extinguió contra ellos.


Y si al equipo le faltó un cambio de marcha desde la sabiduría, Almirón aún debe recursar la materia de los cambios tácticos. Ayer se acentúo que el DT toma malas decisiones. Lo demostró tirando a Graciani a la cancha. Lo confirmó apostando otra vez por Benítez (si la tocara más... quizás). Y dio la estocada final sacando a Pisano.


Mientras Benítez continúa con su pasantía eterna en Primera (modo Fredes on), a Pizzini lo mandó a jugar en la reserva. Y ahí es donde aparece la justificación del DT al sacar a Pisano que hace ruido: "Desborde teníamos, la idea era tener gente en el área".


El Enano, además de complicar por las bandas, es el único con quiebre de cintura para romper defensas esquemáticas, como la de ayer. Pero por otro lado, de los nombres en cancha (Benítez, Graciani, Toledo, Tagliafico), ninguno desbordó; es decir que su análisis, en esa escala, también es erróneo. Entonces, si al que más saca el fruto por las bandas lo mandás a reserva y al único que rompe líneas con gambetas lo sacás, dejás seres inertes en cancha, que son un complemento en ofensiva, pero no la herramienta principal. Ahí falleció Independiente en la partida de ajedrez contra Argentinos.


Quizás, el entrenador deba dejar la testarudez de lado (como con Victorino) y darle oportunidades a Pizzini, Alexis Zárate (está claro que Toledo no rindió en 10 fechas), probar variantes por Méndez. Buscarle lavar la cara al equipo con algún ingreso para no perder el disco duro que guardó la información de los mejores momentos. Además de brindarle más confianza a Pisano y no colgarlo en la plaza porque falla en algún que otro retroceso. Independiente, debe cambiar.