La oposición destacó el alcance del paro y renovó sus críticas al Impuesto a las Ganancias

Representantes de todo el arco no kichnerista coincidieron en cuestionar el gravamen que motivó la medida

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 Gerardo Viercovich 162
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Más allá del nivel de acatamiento, nadie se animó a cuestionar el impacto. Incluso Cristina Kirchner se vio impedida de restarle trascendencia, lo que no evitó que afirmara que su alcance sólo se explica por la huelga del transporte. Para Hugo Moyano, fue "contundente". Para la oposición, conveniente. Lo cierto es que hoy no hubo quien pudiera pasar por alto el paro.

La oposición, por supuesto, no esquivó el tema. Las voces se unieron para resaltar la medida de fuerza y, sobre todo, el leitmotiv que la impulsó: la necesidad de que haya un cambio en el Impuesto a las Ganancias. La reacción era más que previsible. Los gremios lograron darle una visibilidad total a un tema que la mayoría de los partidos no kirchneristas se esfuerzan en reclamar y que rara vez trasciende las fronteras de un recinto o un título periodístico.

Quien picó en punta con su pronunciamiento fue Sergio Massa. El jefe del Frente Renovador emitió en un comunicado en el que puso tono electoral a una postura que sostiene al menos desde la campaña que lo llevó a Diputados. "A partir del primero de enero de 2016 vamos a tener gravado Ganancias sólo a la categoría de directivo y gerente", dijo.

El precandidato a Presidente apuntó al concepto mismo del impuesto: "Basta con buscar en el diccionario la definición de salario y de Ganancias. La primera es una remuneración por trabajo, no es Ganancias. Esa idea nació para afectar a directivos y gerentes, y terminó hoy regando a docentes, colectiveros, médicos". Y acotó: "En 2005, 200.000 trabajadores pagaban ganancias, hoy más de 1 millón. El Gobierno aprieta la soga en el cuello del trabajador".

Otro aspirante a ocupar la Casa Rosada que alzó su voz contra el tributo fue el gobernador cordobés, José Manuel de la Sota. El eje argumental fue el mismo: "El salario no es ganancia. Cuando Perón puso el Impuesto a las Ganancias lo hizo para que lo pagaran los presidentes de las empresas, no los trabajadores", dijo.

"Este gobierno habla de la década ganada, pero resulta que según sus estadísticas solo el 10 por ciento de los trabajadores gana más de $15.000 por mes. ¿Cómo podemos hablar de justicia distributiva si el 90 por ciento de los argentinos gana menos de $15.000 por mes? Más aún, si no sabemos cuántos pobres hay porque el gobierno cree que medir la pobreza es estigmatizarla?", se preguntó.

Tras aseverar que más que Ganancias el principal problema económico a atender es la inflación, advirtió: "Al paro se llego por falta de diálogo, porque el Gobierno no entiende que es el diálogo y no la confrontación lo que los permitirá salir adelante".

Francisco de Narváez, hoy encolumnado en las filas del massismo y aspirante a conquistar la gobernación bonaerense, consideró que "es una tremenda injusticia" que los trabajadores paguen Impuesto a las Ganancias porque -él también- dijo que "el salario no es ganancia". "Es injusto que paguen impuestos a las ganancias hasta docentes, jubilados o enfermeros", cuestionó.

Sin embargo, indicó que está "en contra de los piquetes que impiden la libre circulación de la gente", con referencia a las manifestaciones realizadas por el sindicalismo combativo alineado con el Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS).

Desde el radicalismo, Mario Barletta lamentó que "el esfuerzo, lo que uno se gana dignamente, se lo lleva este Gobierno con esta aplicación absurda del Impuesto a las Ganancias". "Es una locura que los trabajadores estén midiendo cómo impactan los aumentos en los sueldos dados en paritarias, porque los descuentos por ganancias pasan a ser exorbitantes. A esto nos ha llevado este Gobierno populista, que tiene que recaudar a cualquier precio para mantener el clientelismo", lanzó el diputados.

Como De la Sota, el senador de Proyecto Sur, Fernando "Pino" Solanas, identificó a la inflación como el mayor problema. Aun así, dijo que la medida de fuerza "es el legítimo reclamo por la eliminación del Impuesto a las Ganancias y jubilaciones dignas" y remarcó que "los paros siempre son llamados de atención".

La misma asociación hizo su par del PRO, Gabriela Michetti. "La ?inflación se come nuestros ingresos y el gobierno nacional no actualiza la base del mínimo no imponible para financiar un gasto, que en algunos rubros, es irresponsable". "Este año tenemos la posibilidad de cambiar nuestra realidad en las urnas, usemos nuestro derecho para construir una ?Argentina más justa", agregó.

En tanto, el diputado nacional por el Frente de Izquierda

Néstor Pitrola

evaluó que la huelga "es más funcional" a ese espacio político "que a Hugo Moyano", y criticó a la "burocracia sindical". "Por eso, no creemos que este paro sea solo por Ganancias. Es el mayor paro en los 12 años del kirchnerismo. Ganancias ha sido sólo el motor. Hay otras reivindicaciones, como los salarios y los despidos".

"Pedimos la abolición de Ganancias, la prohibición de los despidos, paritarias que compensen la inflación y pase a planta permanente de los trabajadores precarizados", resaltó.