La DAIA duda de la veracidad de los archivos de inteligencia sobre la AMIA que se desclasificaron

El Gobierno ordenó que se revelen los documentos de la causa. Aunque celebró la decisión, la entidad judía consideró que está en tela de juicio la información que se resolvió guardar

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Aquejado por acusaciones y sospechas, el Gobierno intenta en las últimas semanas mostrarse accesible a colaborar con la investigación de la AMIA. El objetivo es claro: debe despegarse del rol de encubridor que les atribuyó Alberto Nisman a Cristina Kirchner y a otros funcionarios. Este viernes hizo un nuevo gesto al oficializar, tal como lo anticipó el titular de la SI, Oscar Parrilli, la desclasificación de los archivos de inteligencia referidos al caso.

La orden para que salgan a la luz los documentos fue comunicada en el Decreto 395/2015 publicado en el Boletín Oficial, que lleva la firma de la Presidente y el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández. Cumplió así con el pedido que hicieron los fiscales que remplazaron a Nisman en la UFI-AMIA: Roberto Salum, Sabrina Namer y Patricio Sabadini.

En una primera reacción, el vicepresidente de la DAIA, Waldo Wolff, celebró la medida. Y aclaró que se enteró "como cualquier ciudadano, más allá de ser querellantes" en la causa.

No obstante, puso reparos a la novedad que pueda significar el anuncio. "Más allá de celebrar toda información nueva que pueda venir, lo que está en tela de juicio es la veracidad de la información, entendiendo que quienes hicieron la instrucción hoy están acusados de ser parte de un aparato que no tenía control", advirtió.

En declaraciones a radio Mitre, observó que "habría que ver si aquellos que archivaron, guardaron pruebas que en definitiva hoy los inculparían si no las hubieran transmitido como relevantes en su momento".

Wlado Wolff, en radio Mitre.

Wolff detalló el motivo de su cautela. "El gran interrogante es saber si hoy, casi 21 años después, alguien que tenía que encargarse de guardar información y mostrarnos información relevante para algo que hasta el momento no supiéramos, lo guardó".

"Si hoy aquellos que tenían que guardar información nos dicen que lo que está guardado es información absolutamente reveladora, habría que preguntarse por qué no la mostraron antes", remató.

De todos modos, el vice de la DAIA indicó que todavía no había podido conversar e intercambiar opiniones sobre el tema con otros dirigentes de la comunidad judía.

El pasado 19 de enero, en una nota enviada a la jueza federal María Romilda Servini de Cubría, Parrilli informó que el Gobierno autorizó la desclasificación de los nombres de los agentes de inteligencia involucrados en el encubrimiento del atentado a la AMIA denunciado por el fallecido fiscal Nisman, así como de los audios que los involucran.

Cuatro días antes de su muerte, Nisman había pedido "la desclasificación de la identidad, las acciones, los hechos y circunstancias correspondientes al plan de inteligencia que surge del producto de las intervenciones telefónicas de los abonados nro. 11-3238-4699, 11-3315-6908, 11-3964-0799 y 11-6224-0263".