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La Encuesta Permanente de Hogares dio cuenta de que 2014 terminó con una tasa de desempleo de 7,2% de la población económicamente activa, con lo que volvió a la proporción que habría registrado en 2011 y 2012, avanzó en una décima de punto porcentual en un año.
En el caso específico del último cuarto del año la tasa de desempleo bajó a 6,9%, frente al salto a 7,5% que había acusado en los seis meses previos, constituyéndose en la mayor disminución para ese período desde la crisis de las hipotecas suprime en los EEUU, entre fines de 2008 y 2009, pese a que diversos indicadores de actividad dieron cuenta de severas contracciones, como las ramas terminal automotriz, de motos, la construcción, el mercado inmobiliario y el consumo en general.
El Indec midió que en sólo tres meses el desempleo cayó en más de medio punto porcentual de la oferta laboral
Según el relevamiento del Indec la tasa de actividad, PEA o simplemente de participación de la población en el mercado de trabajo se elevó en sólo tres meses en medio punto porcentual de la población total, a 45,2% de los habitantes, pese a que estacionalmente la estadística oficial muestra en ese período un retroceso, salvo en años de crisis y consecuente contracción del producto bruto.
En paralelo, pese a que las propias estadísticas oficiales dieron cuenta de un generalizado retroceso de la actividad y disminución de las horas trabajadas en la industria, pero también en el comercio interior y exterior, el agro y las inmobiliarias, la EPH dio cuenta de un aumento intensivo del empleo remunerado en 0,6% de la población total, a 42,1% de los residentes, fenómeno que no se había observado en los cuatro años previos.
Sólo se mantuvo elevada la tasa de subempleo, al equivalente a 9,1% de la población, esto es de personas que estuvieron ocupadas menos de 35 horas semanales, pese a que tenían intenciones de hacerlo por más tiempo.
Peor que en 2013
Sin embargo, la EPH no pudo evitar mostrar sendas caídas en las tasas de actividad y empleo del último trimestre respecto de las verificadas un año antes. De ahí que en ese cotejo surgió que el desempleo se incrementó en medio punto porcentual, a 6,9% de la población económicamente activa.
Para el universo de 31 aglomerados urbanos relevados la estadística oficial dio cuenta de que sobre una población de 26,7 millones de personas, participaron del mercado de trabajo 12,1 millones, aunque lograron su objetivo de obtener un empleo 11,2 millones, y 837 mil quedaron desocupados y 1,1 millones se ocuparon menos de 35 horas por semana.
La proyección a total país arrojó más de 1,3 millones de desocupados
En comparación con un año antes las estadísticas dieron cuenta que se elevó la oferta de trabajadores en 203 mil personas y la ocupación en sólo 125 mil, mientras que 78 mil se sumaron a la fila de desempleados.
La extrapolación de esas estadísticas al total nacional de 42,7 millones de personas, determinó que entre el último trimestre de 2013 y similar período del año siguiente, la oferta laboral se incrementó en apenas 33 mil personas y los empleados se redujeron en 104 mil personas, los cuales combinados derivaron en un aumento de los desocupados en 137 mil habitantes, a 1,32 millones de personas.
Pleno empleo en Chaco
Una vez más el Indec midió máxima ocupación de los que buscaron trabajo en Gran Resistencia, fenómeno determinado por la pobre oferta de 29,4% de los residentes en ese aglomerado, la menor proporción de todo el país, con una brecha negativa de casi 16 puntos porcentuales respecto del promedio nacional.
En Gran Resistencia sólo busca empleo menos de un tercio de la población
También cerraron el año con niveles de desempleo mínimos, próximos a cero los aglomerados de San Luis – El Chorrillo, Santa Rosa – Toay y Formosa 2,3% de la oferta laboral.
En el otro extremo, la EPH ubicó con los índices más altos de desempleo a los aglomerados urbanos de Mar del Plata – Batán 10,9%, Gran Córdoba con 10,2%; y Gran Rosario 8,7 por ciento.