Los intensos combates en la región de Donetsk, en Ucrania, han provocado nuevos desplazamientos, elevando el número de personas que han abandonado su hogar a cerca de un millón, lo que ha marcado el invierno con un aumento del deterioro humanitario, informó hoy la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur).
Según el Ministerio de Política Social de Ucrania, el número total de desplazados registrados en todo el país se eleva actualmente a 980.000 personas, una cifra basada sólo en los casos registrados.
Además, de acuerdo con un comunicado difundido por el Acnur, desde febrero de 2014 unos 600.000 ucranianos han solicitado asilo u otras formas de estancia legal en países vecinos, especialmente en Rusia, pero también en Bielorrusia, Moldavia, Polonia, Hungría y Rumania.
Los equipos de Acnur han informado que los violentos enfrentamientos entre las milicias separatistas prorrusas y las fuerzas del Ejército ucraniano que han asolado durante las dos últimas semanas la región de Donetsk han provocado la destrucción masiva de edificios e infraestructuras, así como el colapso de los servicios básicos.
Las autoridades locales han empezado a evacuar a las personas de las zonas en conflicto, pero muchas siguen atrapadas por los combates, incluso en sótanos y edificios que están bajo bombardeos constantes.
Hasta el momento, más de 2.800 civiles, incluyendo unos 700 niños y 60 personas con discapacidad, han sido evacuados de las ciudades de Debaltseve, Avdiivka y Svitlodar, que han sido escenario de intensos combates.
Los evacuados están siendo trasladados a ciudades controladas por el Gobierno en el norte, como Slaviansk, Sviatohirsk, Kramatorsk y Grodivka, así como a la cercana región de Járkov.
Además de las evacuaciones organizadas, los civiles siguen huyendo de las zonas en conflicto por sus propios medios, enfrentándose a muchos peligros en el camino.
Los equipos de Acnur sobre el terreno han informado que muchas personas recientemente desplazadas están llegando a zonas fuera de conflicto sin pertenencias ni ropa adecuada para el invierno. Con el objetivo de atender las necesidades más urgentes, Acnur ha empezado a distribuir ayuda humanitaria en zonas del norte de la región de Donetsk, el principal punto de llegada de los desplazados que huyen de zonas en conflicto.
La falta de acceso a servicios públicos que antes ofrecían las autoridades centrales ha deteriorado drásticamente la difícil situación de la población civil en zonas no controladas por el Gobierno. Esta situación se ha visto aún más agravada por las restricciones de movimiento de personas y bienes. El recrudecimiento de los combates ha limitado la distribución en las zonas en conflicto de ayuda de emergencia, la cual se necesita de forma urgente.
Los combates en la región se han recrudecido después de que se rompiera una débil tregua que rigió durante un mes en medio de acusaciones cruzadas entre las partes de prolongar la lucha.
Los bombardeos indiscriminados obligaron a Naciones Unidas a elevar su cálculo del total de muertos en el conflicto a más de 5.350 personas. Además, la ONU censuró enérgicamente tanto al gobierno de Ucrania como a los rebeldes separatistas prorrusos por convertir en objetivos escuelas, mercados, hospitales y paradas de autobús, donde mueren civiles.