"Si la alternancia es buena para la Nación y la Provincia, ¿por qué no lo es en los municipios?"

A poco de lanzar su candidatura a intendente de Tres de Febrero por el PRO, Diego Valenzuela visitó los estudios de InfobaeTV. Pidió "llevar a los municipios del Gran Buenos Aires el debate institucional"

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El periodista e historiador Diego Valenzuela cargará el año próximo con uno de los desafíos más importantes del PRO en la provincia de Buenos Aires: la semana que viene, con la presencia de los precandidatos a la gobernación bonaerense Jorge Macri y María Eugenia Vidal, lanzará su candidatura para disputarle a Hugo Curto la intendencia de Tres de Febrero, un distrito que supera en población a cuatro provincias y que es gobernado por uno de los conocidos como "barones del Conurbano" desde hace 23 años.

"Parte del debate que hay que llevar a los municipios del Gran Buenos Aires es el debate institucional. (...) En los municipios hay una lógica permanente de hacerse cargo de los problemas. Hay muy buenos en el GBA y no necesariamente del PRO. Pero a veces queda muy al costado el tema institucional. A mí me gustaría que los funcionarios que ganen, presenten declaración jurada. Gobierno abierto: todo se publica en internet, incluidas las licitaciones. Las audiencias públicas se hacen antes y no después de las obras, como ha ocurrido en Tes de Febrero", explica.

El candidato se manifestó a favor de la alternancia en los cargos –con un máximo de dos mandatos–, algo no acostumbrado en los los municipios. "Si algo es bueno para la Nación y la Provincia, que es la alternancia en los mandatos, ¿por qué no lo es en los municipios?", se preguntó. De todos modos, evitó plantear la disputa en términos de "nueva/vieja política": "Es un desafío permanente de mantener los valores, la mirada o la convicción de mantener ni la vieja ni la nueva política: la buena política".

Valenzuela explicó que fue a raíz de su trabajo como funcionario en la ciudad de Buenos Aires –está a cargo, en el Ministerio de Gobierno, de mejorar el enlace entre porteños y bonaerenses– que surgió su vocación. "La mayoría de los temas son comunes entre el Conurbano y la Capital –el transporte, la salud, la educación, los residuos–. Ahí tenemos un gran debate de cooperación", explica, y agrega: "Esto me despertó un gran interés y vocación pública. Aprendí a entender el valor de la gestión".

"Me impactó una frase del papa Francisco cuando dijo 'no sean cobardes, no balconeen la vida'. Y esto de estar en el balcón mirando me hizo reflexionar si quería estar en el balcón mirando o quería estar protagonizando", sostuvo.

Sobre la situación de la provincia, elegió al gobernador Daniel Scioli por ser "una persona de diálogo, algo que es bueno dado el legado del kirchnerismo de esta etapa", pero sostuvo que "no se destaca por su gestión". "No se ha animado, no ha podido, o no ha querido dar el debate de fondo que es el federalismo de la provincia de Buenos Aires. Es cierto que los gobernadores son el resultado de un acuerdo nacional o algo que sucede en la Capital Federal", explicó.

También, valoró "la primera etapa del kirchnerismo, con Duhalde", a la que calificó como "una etapa de reconstrucción de la autoridad presidencial. Volvió la política a conducir la economía, se volvió a reconstruir el tejido social", para luego matizar: "Con el tiempo, y especialmente la última etapa de la presidenta Cristina, se acentuaron los rasgos más negativos del kirchnerismo". "Por un lado deja legados positicos –la AUH, la cobertura jubilatoria, el Ministerio de Ciencia y Tecnología–, pero por otro lado, además de la pelea y la enemistad, esta cosa revanchista genera contradicciones. La AUH es buena –aunque faltaría sancionarla por ley, pero te bancás una inflación del 40%", añadió.