Las 7 señales valiosas de nuestro GPS Mental

¿Existe un satélite interno para orientarnos en la vida? ¿Es posible saber cómo funciona y reconocer los obstáculos que generamos con nuestro pensamiento y así concretar nuestros sueños y deseos?

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Cada uno de nosotros vive según el mapa mental que se ha trazado. Lo afirma Celia Antonini, psicóloga y autora del libro GPS Mental. En esta entrevista con Infobae, nos brinda 7 valiosas señales para llegar a destino. Afirma que es más fácil y rápido aprender a manejar nuestra cabeza que aprender a jugar bien al tenis y, aludiendo al reciente premio de la Fundación sueca, dice: "Si el Nobel de Medicina fue a los descubridores del GPS cerebral que identifica el sistema que hace posible que nos orientemos en el espacio, GPS Mental hace posible que nos orientemos en la vida... ¡Vamos bien!"

-¿Qué es GPS Mental?

La sigla GPS significa Sistema de Posicionamiento Global. Es un dispositivo que se utiliza en los autos y que necesita de varios satélites para poder fijar su posición. De igual manera el GPS Mental también utiliza 4 indicadores para establecer el lugar donde nos encontramos. Estos satélites mentales que nos permiten conocer dónde estamos son el pensamiento, las emociones, la autoestima y las creencias. De esa forma y a partir de la combinación de estos 4 factores podemos determinar nuestra ubicación en la vida.

-¿Se puede modificar el mapa de nuestra mente?

Absolutamente. Gracias a la plasticidad de nuestro cerebro podemos rediseñar nuestros caminos y transformarlos en plataformas que nos lleven directamente a la consecución de nuestros sueños y deseos.

- ¿Hay una edad recomendable para hacerlo?

No hay limitaciones de edad. La única capacidad que no se pierde con el correr de los años es la de aprender. Una persona de 70 años puede hacer las mismas modificaciones que un joven de 20 años. Y, aunque parezca mentira, aprender a manejar nuestra cabeza se logra de manera más fácil y más rápidamente que aprender a jugar bien al tenis.

-¿Cuál es la calle del mapa que más cuesta transitar?

Hay muchas que nos generan dificultades. La señal de doble circulación: la relación con los otros. Calzada resbaladiza: los celos. La señal Rotonda: Dar vueltas sin avanzar. Pendiente descendente: los pensamientos negativos. Hay señales que nos muestran el peligro que corremos si continuamos por ese camino.

A continuación, 7 señales para orientarnos en la vida, según GPS Mental:

NO RETOMAR

EL PASADO

El pasado puede ser su mejor motor o su peor mochila. Si los hechos pasados usted los toma como experiencia y les saca provecho para avanzar, darse aliento y no cometer los mismos errores, entonces ¡adelante! No solo no correrá riesgos, sino que será su guía y su sostén en el presente.

Si va a pensar que su vida tendría que haber sido de otra forma, que debería haber hecho algo diferente o que simplemente no tendría que haber pasado lo que pasó, deténgase frente a la señal de No Retomar. No avance, el dolor, el desencanto o el arrepentimiento lo estarán esperando.

SEÑAL CALLE SIN SALIDA

EL MIEDO

El miedo es uno de los peores enemigos al que podemos enfrentarnos, puede llegar a impedirnos lograr los objetivos que nos proponemos, destruir nuestros ideales y transformarse en un indeseable compañero de ruta. Su fuerza radica en que nos acompaña desde siempre.

El miedo se presenta de muchas formas. Si lo pensamos como un abanico, podemos poner en un extremo al hermanito menor del miedo: la ansiedad y en el otro extremo a su hermano mayor: el pánico. Dentro de ese espectro, a su vez fluctúan la incomodidad, ansiedad, preocupación, nerviosismo, temor, tensión hasta el terror y el pánico.

Si cada vez que siente alguna clase de temor puede relacionarlo con la señal de Calle Sin Salida, evitará adentrarse en una emboscada que tiende el miedo y encontrará la manera de escapar cuanto antes de una de las emociones que con más frecuencia nos esperan al doblar la esquina.

SEÑAL CEDA EL PASO

A LAS SITUACIONES QUE NO PUEDE MODIFICAR

Cada uno de nosotros se enfrenta a diario con situaciones o personas que van en un sentido contrario al que nosotros deseamos y en la mayoría de los casos no estamos preparados mentalmente para aceptar que los acontecimientos no sucedan de la manera que esperamos.

Quizás el problema más importante con el que nos enfrentamos sea con nosotros mismos. No sabemos administrar nuestros recursos internos y en ocasiones libramos batallas innecesarias y pérdidas de antemano.

Ceder el paso es no luchar con aquellas situaciones donde la posibilidad de modificarlas no está en nuestras manos. Si abandonamos el intento de cambio, abandonamos el malestar.

EXCESO DE VELOCIDAD

OMNIPOTENCIA, SOBERBIA, NARCISISMO, ORGULLO Y VANIDAD

Hay muchas maneras de estrellarse, pero la omnipotencia, la soberbia, el narcisismo, el orgullo y la vanidad son las mejores a la hora de apretar el acelerador y de sobrepasar los límites permitidos. Estas conductas y formas de manejarnos en la vida presentan un mismo denominador común: el mismo sentimiento de superioridad, pero se diferencian entre sí por las motivaciones que llevan a sentirse superiores.

La gente no quiere a esa clase de personas. La soporta y la tolera cuando no le queda otra alternativa, pero se aleja a la primera oportunidad que se presenta.

Ninguna persona quiere sentirse humillada y maltratada. Si usted tiene alguna de las características anteriormente descriptas, hágase un favor a sí mismo, saque el pie del acelerador y conduzca su vida a la velocidad que vamos todos.

SEÑAL PENDIENTE ASCENDENTE

AUTOEXIGENCIA

La autoexigencia desmedida se transforma en una sobreexigencia que nos destruye.

Hay personas que no encuentran un minuto para descansar y si lo hacen, se sienten culpables porque creen que están perdiendo el tiempo. Son esclavos de las obligaciones y tienden a preocuparse por todo.

Mantenerse cuesta arriba durante toda la vida es un esfuerzo incalculable que implica perseverancia, tensión y frustración. Porque a decir verdad, las personas que se autoexigen más allá de lo razonable, no llegan a ningún lado. El camino hacia la cima es una ilusión que persiguen creyendo que serán admirados por sus esfuerzos y dedicación en las actividades que emprenden y que ello los compensará por el sacrificio realizado. Pero no hay compensación posible cuando el precio que se paga es tan alto.

SEÑAL SALIDA DE EMERGENCIA

¡RESCÁTESE!

La mente tiene un sinfín de posibilidades y una de ellas es un sistema de rescate para cuando nos encontramos en emergencia emocional. Aunque muchos de nosotros no lo utilicemos, tenemos un sistema de auxilio que está preparado para afrontar cualquier contrariedad.

En todos los días de su vida no hay nadie mejor ni más cerca de usted que usted mismo. Usted es la primera persona que puede llegar a su rescate. Usted mejor que nadie sabe dónde le duele, por qué le duele, cómo le duele y qué puede aliviarlo. Usted conoce sus necesidades mejor que nadie. Pero a pesar de ello, espera que se le pase solo o que alguien que no tiene la menor idea de lo que está sintiendo usted, toque en el lugar justo y lo ayude a que su malestar desaparezca. Bastante improbable, por cierto.

Trate de apagar su malestar con sus propios recursos.

¡Usted puede rescatarse a sí mismo!

AUTOPISTA PRINCIPAL

EL CAMINO CORRECTO

La señal de autopista principal indica que estamos en el camino correcto y como cualquier autopista la posibilidad de acceder a ella es a través de distintas subidas. Por distintas vías podemos abordarla y entrar en la carretera principal que nos llevará directamente hacia la consecución de nuestros objetivos, transitando una vía más ligera y con menos obstáculos.