"Las pericias arrojaron que Melody no fabula"

Lo afirmó Marcelo Biondi, el abogado de la familia de Melina Romero. Brindó detalles sobre el examen psicológico al que fue sometido la joven de 17 años cuyo testimonio motoriza el expediente

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"Según las pericias, es una persona que vivió una situación muy traumática. Los hechos coinciden con la realidad que vive, de mucho miedo y ansiedad", informó Biondi en una entrevista con C5N. "Lo más importantes es que tenemos una pericia oficial que concluye que Melody no fabula", insistió. Y contó que "le sugirieron que haga tratamiento psicológico".

El testimonio de Melody, de 17 años, es clave, ya que la hipótesis que maneja la fiscal María Fernanda Billone se basa casi exclusivamente en su declaración.

Cuando la joven declaró por primera vez, no se ubicó en la escena del crimen, sino que dijo que uno de los detenidos, Joel Fernández ("Chavito") le contó lo que ocurrió el día que Melina fue asesinada. Pero el 16 de septiembre denunció en sede judicial que fue amenazada por dos hombres que circulaban en una camioneta negra y reconoció por primera vez que fue testigo directo del crimen.

"Ella volvió a declarar otras veces, pero nunca más volvió a cambiar su versión. En lo esencial, siempre fue la misma. Los relatos son coherentes, salvo algunos detalles. La única vez que dijo algo distinto fue la primera, y creemos que lo hizo por miedo", analizó el abogado Biondi.

Las dudas sobre el testimonio de Melody surgieron cuando trascendió que habría dicho que el crimen ocurrió en la casa del único menor detenido, "Toto", de la que brindó una descripción errada. Sin embargo, el 16 de septiembre, el día que contó por primera vez que presenció el asesinato, puso el dedo sobre el pai umbanda César Sánchez, a quien dijo que vio en televisión y que ayer fue detenido.

Según el relato de Melody, en la madrugada del domingo 24 de agosto la pasaron a buscar en un auto en el que estaban Melina, tres detenidos (Joel, Elías y "Toto") y otro hombre que no conocía. Dijo que Joel le contó una semana antes que querían "drogar y enfiestar" a su amiga, y que en el automóvil había una botella de alcohol con pastillas, marihuana y cocaína.

Siempre según su relato, fueron a un templo umbanda en el que "César", un pai, les dio una habitación en la que empezaron a consumir drogas y bailar, hasta que en algún momento Melina se quiso ir y el pai la amenazó con un arma. Luego la desnudaron, la violaron y la golpearon hasta dejarla inconsciente. Mientras la joven pedía que la acerquen a un hospital, la ultimaron colocándole una bolsa en la cabeza. Luego la ataron y la llevaron en un auto hasta el arroyo Morón, donde descartaron su cuerpo.