Mundial de Voley: Polonia campeón en un torneo que dejó a una Argentina sin sorpresas

El local venció por 3 a 1 al equipo dirigido por Bernardo Rezende ante 60 mil personas y se consagró campeón luego de 40 años. Por su parte, el conjunto de Julio Velasco cerró una nueva participación mundialista con altibajos

Compartir
Compartir articulo
  162
162
  162
162
  162
162

La 18va edición del campeonato Mundial de vóley mostró a la superpotencia polaca comandada por Stéphane Antiga en un nivel superlativo que culminó con un merecido triunfo ante el Brasil de Rezende.

Un local se llevó la gloria por primera vez tras el triunfo obtenido por Checoslovaquia en 1966. En la final, la clave estuvo en la conducción y variantes que pudo ofrecer el armador Zagumny, la precisión quirúrgica para escoger cada atacante en determinado momento. Los brasileros dependieron mucho del giro de sus centrales y, cuando fallaron en las puntas, Bruno se quedó sin alternativas.

La selección argentina no pudo con sus propios fantasmas y finalizó en la 11° posición (dos escalones más abajo que en Italia 2010). No hubo nada que llame la atención. Cualquiera que haya seguido a este equipo, desde el comienzo del proceso en 2009, sabrá que, salvo algunas ediciones de World League, no pudo evidenciar el grandísimo talento del plantel, tanto en Juegos Olímpicos como en Mundiales.

La posición final es un tanto relativa, no hay que dejarse llevar por lo cuantitativo de una tabla, sino por el nivel demostrado a lo largo del torneo y lo cierto es que en esto hay que hacer hincapié a la hora de analizar el Mundial de Argentina. Los muchachos de Julio Velasco dejaron más puntos positivos que negativos, ocurre que deja la sensación de que juegan en su verdadero nivel cuando no sienten la presión de competir para dar finalmente ese salto de calidad que tanto esperan todos.

  162
162

Nadie duda del potencial que ostenta este equipo, a mi entender, el más talentoso desde hace 20 años. Los que verdaderamente conocemos todo lo que los jugadores (los que ingresan en la lista mundialista y los que no) viven para llegar a su objetivo jamás nos atreveríamos a criticarlos por no llegar a un podio. Los voleibolistas (como casi la totalidad de los deportistas) dejan de lado a sus familias desde pequeños, lidian con dirigentes chupasangre, con periodistas infladores, ladinos y que, en la primera de cambio, les sueltan la mano. Lidian con todo esto y, encima, lo hacen desamparados en soledad. Es por ello que caerle a los jugadores (por más buen pasar económico que detenten) sería injusto y exitista.

Ahora bien, tampoco podemos soslayar el hecho que desde hace años el voley argentino aguarda por una victoria que no llega, ese evento bisagra que conduzca a este país en camino a la élite. Y la espera se debe a que no podemos seguir viviendo del recuerdo del '88, esa selección jugaba sin la necesidad de entrenadores (verifíquenlo ustedes en los 11:50 de este link) porque la materia prima está (más de la mayoría se desempeña en las ligas más competitivas del planeta) y ahora el arquitecto es uno de los mejores tres entrenadores en la historia del voley mundial: Julio Velasco.

  162
162

Argentina ganó los partidos esperables (palizas a Venezuela, Camerún y Australia), perdió de manera contundente ante Serbia y Polonia (esta última, acaso la más lógica de todas sus derrotas), jugó muy por debajo de su nivel contra Francia e Irán en los encuentros que debía hacer algo más para llegar a la tercera ronda.

Una vez eliminada, demostró su poderío ante una diezmada Italia (sin la estrella Zaitsev) y eliminó a una superpotencia como Estados Unidos en el mejor cotejo nacional de los últimos tres años. La consolidación de la dupla armadora De Cecco, Uriarte, la potencia de Conte como brazo armado del equipo, la recuperación de un jugador como Filardi, el crecimiento de Crer y Solé y la sorprendente aparición de Ramos (revelación argentina del mundial, en mi opinión), Closter y González, dejan un panorama esperanzador para Río 2016.

Insisto, así como no debemos ver el 11° puesto como punto de partida, tampoco inflemos el pecho cuando veamos el 5° lugar de Londres 2012. Ambos engañan. Estos jugadores son bastante inteligentes como para ser defendidos con excusas inverosímiles como "es un proceso que recién empieza" o "¿qué querés? Si Francia tiene a N'Gapeth, así cualquiera gana". Esta selección no necesita de escuderos interesados. ¿Por qué? Porque Alemania llegó a un impresionante tercer puesto no sólo de la mano de Grözer sino de un juego en conjunto basado en la paciencia y humildad. Porque Irán hizo del amor propio su principal arma para sorprender a propios y ajenos. Porque Francia reunió individualidades y las potenció en un equipo donde todos son titulares.

Sólo estos jugadores saben cuál es el saldo final, cuál es el futuro y cuánto deben trabajar para conseguir la meta. El apoyo de la dirigencia, del cuerpo técnico y de la gente, lo tienen. Como dijo el filósofo Ralph Waldo Emerson, la única persona que estás destinada a convertirte, será aquella en la que decidas ser...

Posiciones finales:

1) Polonia

2) Brasil

3) Alemania

4) Francia

5) Rusia

6) Irán