Los números de la violencia relacionada al narcotráfico en México han caído en los últimos meses, y algunos se animan a hacer un pronóstico alentador. Las mediciones oficiales muestran que la escalada de violencia en las zonas calientes -esas ciudades que comparten la frontera con los Estados Unidos- alcanzó su pico máximo en 2010, y a pesar de que la región continúa siendo un caldo de cultivo para los cárteles mexicanos, las estadísticas muestran una caída sostenida en la cantidad de asesinatos y hechos relacionados con el narcotráfico.
Valdés Zurita, experto en narcopolítica, habla de una "franca" disminución, y explica que si bien la escalada que comenzó en 2007 tras la decisión gubernamental de lanzar una guerra contra el narcotráfico trajo un incremento en la inseguridad, el fenómeno llegó a su máximo en 2010 y ahora demuestra una caída.
"A pesar de la violencia, la guerra contra el narcotráfico empezó a dar resultado. No hay que regatear esa política. Se atrapó a cabecillas de cárteles y otros murieron. Esa política tuvo efecto y sólo ahora se están viendo resultados positivos," comenta Valdes Zurita en referencia a la cruzada lanzada por el entonces presidente Felipe Calderón.
"La política ha evolucionado. La nueva administración (de Peña Nieto) ha cambiado algunos enfoques. Es importante la regionalización y entender que el narcotráfico no se trata de un problema de todo México, sino que la violencia está en los estados de la frontera norte por los que transita la droga hacia los Estados Unidos, que es el mercado más grande del mundo. Y tampoco es todo el estado, sino que son las ciudades las que son el tránsito inmediato en la frontera," asegura.
El experto mexicano es claro al explicar que la baja en la violencia de la región es un producto de los logros del enfrentamiento inicial, de cambios en las estrategias del enfrentamiento que se realizan, a la vez que ha habido mayor concentración en la lucha financiera. "Los cárteles están más débiles, también como producto de los ataques entre ellos mismos. Un resultado de la estrategia del gobierno es que se disputen territorio entre ellos," agrega.
Con respecto a la expansión del fenómeno del narcotráfico a nivel regional, Valdes Zurita explica que "es un fenómeno regional que requiere una política regional," y opina que los gobiernos de América Latina deben "sentarse, trabajar y analizar" la situación, y sumar a los Estados Unidos porque es una problemática "continental".
"Si los EEUU no combaten el mercado de consumo y no lo controlan, los países latinoamericanos van a seguir existiendo como países exportadores," explica.
"El enfoque contra el narcotráfico tiene que ser integral y a nivel gubernamental. No hay otra instancia en que se los pueda enfrentar ," concluye.