Microsoft logró un importante aliado para Windows Phone con HTC, caracterizada por sus novedosos diseños. Esta vez se trata del One (M8), cuya versión con Android fue presentada en marzo, lo cual no deja de ser una buena noticia para la empresa de Redmond en su carrera por ampliar la cantidad de equipos disponibles con su sistema operativo.
El HTC One M8 será comercializado por Verizon Wireless en los EEUU a un precio de u$s200.
El modelo es 4G y se destaca por estar construido a partir de un bloque único de aluminio, un proceso que marca el diseño de Apple para varios de sus productos.
Posee una pantalla de 5'' (1080p) y en su interior conviven un procesador quad core Qualcomm Snapdragon 801 a 2,3GHz, 2GB de RAM y Windows Phone 8.1. A eso debe sumársele almacenamiento interno por 32GB, ampliables mediante microSD hasta 128GB.
Además de una cámara secundaria de 5 megapíxeles, se destaca la doble de 4 principal.
HTC mantuvo su filosofía de persuadir a la gente de que no piense cuántos megapíxeles tienen las cámaras, alegando que más no significa necesariamente mejor. El HTC One (M8) tiene una cámara principal de 4 megapíxeles, que es baja para los teléfonos inteligentes de gama alta.
En cambio, HTC se enfoca en hacer que los sensores de cada píxel sean más grandes para que puedan captar más luz y ofrecer mejores tomas en ambientes de poca luz.
Aquí se destaca la segunda cámara, que capta la "información de fondo", ofrece mejores tiempos para el autofoco y la posibilidad de hacer foco una vez que la imagen ya fue tomada. Esto es algo que en el mundo móvil permite Nokia con su aplicación Refocus.
La doble cámara graba video en alta definición y en cámara lenta, cuenta con un doble flash, tarda 300 milisegundos en enfocar la imagen y permite el ajuste manual de ciertas características técnicas.
HTC introdujo una gran variedad de efectos de edición de imagen en el One (M8), como la posibilidad de elegir qué parte de ella está enfocada y cuál no.