El humor del mercado cambió cuando el Gobierno se mostró dispuesto a negociar

El humor del mercado cambió a las 15, cuando se supo que iban a enviar técnicos a negociar con los holdouts (bonistas que no entraron al canje de la deuda). La noticia se asemejó a la llegada del Séptimo de Caballería. La situación continuó complicada pero se vivió con menos dramatismo.

En ese momento, se supo que dos grandes bancos de inversiones pueden hacer su aporte para solucionar el tema. Saben que en la Argentina, en momentos críticos se puede ganar más dinero que en cualquier otro sitio del mundo.

Especulan que puede haber una buena negociación porque no hay que olvidar que para los acreedores hay precios a pagar. Todos los días la factura de sus abogados aumenta y también crece el costo financiero del dinero inmovilizado. Otro dato es que no pueden abusar de su situación dominante porque el sistema financiero internacional está preocupado por este triunfo de los holdouts que puede terminar con un encarecimiento del crédito internacional.

Griesa advirtió que si no se paga en Nueva York, habrá desacato

Por las dudas, la Caja de Valores ya está instruida para que esté pronta a cambiar el domicilio de pago de los bonos. No quieren incumplir con los que aceptaron entrar al canje de la deuda. Si eso ocurre el costo será alto porque el juez Thomas Griesa advirtió que si no se paga en Nueva York, habrá desacato.

Por eso cuando se supo que existía la posibilidad de sentarse a negociar, los ánimos se calmaron y la suerte comenzó a jugar a favor. De hecho el dólar que había llegado a tocar $12,50 no pudo seguir su marcha alcista por el paro de los bancarios que dejaron de atender al público a las 13, y dejó a la plaza sin pesos. Después, las buenas noticias hicieron el resto y la divisa comenzó a bajar hasta cerrar a $12,30, cinco centavos menos que el martes. Para el jueves la divisa libre quedó más floja, se habla de 12,15 pesos.

El "contado con liquidación" que es otro termómetro del mercado, perdió 21 centavos y se operó al cierre a 11,89 pesos.

En el Forex-MAE, la principal plaza cambiaria mayorista, el monto de negocios fue de apenas u$s 85 millones. La mesa de dinero del Banco Central, de todas maneras, pudo comprar u$s 40 millones. El dólar para exportar quedó inmóvil en a $ 8,13 y el mayorista en $ 8,20.

Las reservas subieron u$s24 millones a u$s24.869 millones ayudadas por estas compras y por una suba del oro de 0,43% a u$s1877,22 por onza troy. Las reservas del Central están integradas por 70 toneladas del metal precioso.

Las tasas de interés entre bancos por dinero a un día bajaron 2 puntos a 29% anual y la que se paga al público por plazos fijos a 30 días aumentó un punto a 23 por ciento anual. No es atractiva, pero que haya subido es una señal. En el Mercado Abierto Electrónico (MAE), donde se negocian la mayoría de los títulos públicos, el monto de negocios cayó 20%, a $925 millones por la cautela de los inversores. Sobre el final hubo un ingreso de órdenes de compra que hizo subir a los bonos en dólares de corto y mediano plazo. El Boden 2015 finalizó con una ganancia de 1,03% y el Bonar X que vence en 2017, de 1,4 por ciento.

YPF fue el papel estrella, ganó 5,5% en el Merval y 7,6% en Wall Street

El respiro permitió que el cupón en pesos suba 4,35 por ciento. No hubo negocios sobre el emitido en dólares con legislación neoyorquina.

El Discount en moneda local que indexa por el CER avanzó 0,73% con negocios moderados por 36,5 millones de pesos. En el exterior, el Discount en dólares con legislación Nueva York se mantuvo equilibrado. Este bono vence a fin de mes y el país deberá pagar 228 millones de dólares. Es el más amenazado por un embargo si la negociación no es exitosa.

En la Bolsa, que comenzó con un clima negativo, después de la mitad de la rueda hubo más optimismo. Se negociaron $345 millones, un volumen tan elevado como el de las dos ruedas anteriores. El Merval de las acciones líderes subió 2,93 por ciento.

YPF fue el papel estrella con un alza de 5,46 por ciento. Luego se ubicaron los bancos que están recuperando lo perdido el lunes. El Francés tuvo un avance de 6,27% y Grupo Galicia de 3,7 por ciento. En Wall Street YPF subió 7,63% y Galicia 3,14 por ciento.

Los números de este miércoles fueron esperanzadores. La Argentina consiguió un respiro. El resultado está abierto y los mercados hacen sus apuestas. No hay ambiente de default por lo menos en los precios, pero es apenas una sensación y no un indicador.

Lo que sí es un indicador cierto es el índice EMBI+ de JP Morgan que mide el riesgo país que cayó 8,71% a 797 puntos básicos.