La Asamblea de la Resistencia Cubana, integrada por medio centenar de grupos de dentro y fuera de la isla, pidió hoy a EEUU que no permita la entrada en el país de "agentes de la dictadura castrista" que llegan "en busca de incentivos económicos".
En una carta dirigida a la subsecretaria de Estado para Latinoamérica de EEUU, Roberta Jacobson, solicitan que se niegue visados a "represores castristas" que "vienen de visita" al país en "busca de incentivos económicos" y regresan a la isla para "continuar reprimiendo a los opositores".
Muestran además su "descontento" por la situación en la que se encuentra un grupo de expresos políticos cubanos a los que se les denegó el visado para entrar en los EEUU bajo el programa de refugiados políticos, informó en un comunicado el Directorio Democrático.
Las autoridades de inmigración estadounidenses en La Habana defienden la decisión con el argumento de que estos expresos políticos cubanos fueron "acusados o sentenciados" por "actividades violentas".
Pero, a juicio del exilio cubano, queda probado, a lo largo de los años, que el régimen cubano "ejerce el control sobre el sistema judicial y fabrica arbitrariamente delitos políticos" para encarcelar a opositores por actividades que "son reconocidas en todo el mundo como libertades civiles".
Los informes elaborados por el Departamento de Estado de EEUU revelan además las "sistemáticas violaciones del proceso debido en Cuba" y el uso de irrelevantes o nada fiables pruebas para intentar "distorsionar" los sucesos "cuando los activistas políticos son llevados a juicio", prosigue la carta.
Es indudable, destaca la Asamblea de la Resistencia, que la mayor parte de los documentos dictados por los tribunales cubanos son "parciales", están "distorsionados" y escritos con el fin de "dañar el nombre y la imagen pública" de todos los individuos que "se atreven a oponerse al Gobierno" cubano.
Por ello, piden a Jacobson que "no consienta la injusticia de denegar" a estos expresos políticos y "patriotas" la "oportunidad de reanudar su vida en EEUU", mientras se conceden permisos de visita a algunos "violentos colaboradores de Castro".