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Los legisladores de la Coalición Cívica ARI y Proyecto Sur en UNEN rechazaron asistir hoy de la Asamblea Legislativa de la apertura de sesiones extraordinarias. Cansados de los cánticos, insultos y descalificaciones, advirtieron que "no están garantizadas las condiciones para la realización de un acto institucional" en el recinto.
Mediante un comunicado, los parlamentarios opositores recordaron las asambleas de los últimos años, donde el recinto de la Cámara de Diputados "fue colmado por militantes del oficialismo que durante la sesión agredieron a los legisladores de la oposición". Plantearon que hubo ironías y descalificaciones, y responsabilizaron a la presidente Cristina Kirchner por las agresiones.
"Los integrantes de CC ARI y Proyecto Sur hemos decidido ausentarnos para no convalidar una vez más estos episodios que degradan nuestra democracia y lesionan la investidura del Parlamento", protestaron en el escrito.
La declaración que anticipa el "faltazo" de los interbloques opositores está firmada por los diputados Alcira Argumedo, Elisa Carrió, Pablo Javkin y Fernando Sánchez, y los senadores Magdalena Odarda y Fernando Pino Solanas.
La diputada de la CC-ARI, Elisa Carrió justificó esta mañana su ausencia: "Nosotros no podemos ser auditorios esclavos de un acto no institucional, donde la presidente miente, manipula y desprecia al Parlamento".
Incluso, la legisladora opositora se atrevió a ser más explosiva en su protesta. "Prestarse a un acto fascista es violar la Constitución", fustigó Carrió, y afirmó que sus compañeros del bloque UNEN están "todos de acuerdo en que no hay que someterse a ninguna humillación".
"Deseamos que en la próxima Asamblea Legislativa, el oficialismo respete a todos los miembros del Congreso. En ese caso, volveremos a nuestras bancas para escuchar respetuosamente, y sin sufrir agresiones, el discurso de la Presidente, como lo hemos hecho durante todas las Asambleas que le ha tocado presidir", concluye el comunicado de la CC-ARI y Proyecto Sur.