EEUU le advierte a Irán: "Deben exigirle al régimen sirio que cese los bombardeos"

Teherán es aliado tradicional de la dictadura de Al Assad, por lo que el gobierno de Obama espera un gesto que encauce las negociaciones de paz en la próxima conferencia de Ginebra. "Pueden demostrar que son serios"

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 REUTERS 163
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"Hay pasos que Irán puede dar para mostrar a la comunidad internacional que son serios sobre su papel positivo" en la crisis siria, indicó un responsable del Departamento de Estado norteamericano a los periodistas que acompañan a John Kerry de regreso de Medio Oriente.

"Esto incluye un llamado al régimen sirio a que cese el bombardeo a su propio pueblo", agregó. Estados Unidos ha venido denunciando en numerosas ocasiones el apoyo militar de la República Islámica al presidente sirio Bashar Al Assad, así como al movimiento chiíta libanés Hezbollah, que ayuda al régimen de Damasco en su pugna contra la rebelión.

Washington se opuso, asimismo, al llamado de Rusia y otros países a permitir que Teherán participe en las negociaciones que deben celebrarse en Ginebra el 22 de enero.

Irán, un firme defensor del régimen de Damasco, no figura en la lista de participantes de Ginebra 2, elaborada por el mediador internacional para Siria Lajdar Brahimi.

Varios países occidentales, con Estados Unidos a la cabeza, y la Coalición Nacional Siria (CNFROS), principal alianza opositora, se oponen a la presencia de Irán en la conferencia de paz.

 AFP 163
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La cumbre está prevista para el próximo 22 de enero, pero siempre está el riesgo de que no se concrete. Hay amenazas de los bandos para que la conferencia no prospere. Al Assad no deja de advertir que no quiere dejar el poder.

La Conferencia Ginebra II debe intentar encontrar una solución política capaz de acabar con la guerra civil en Siria, que ha dejado más de 126.000 muertos, según el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH), y millones de refugiados y desplazados.

Siria pide por Irán porque es su aliado histórico, político y religioso. Se trata, en su mayoría, de un país sunita (75%), pero los Assad, en el Gobierno desde principios de los 60, pertenecen a la secta alawí, una rama de los chiítas. Esto forjó una relación con Teherán tras la revolución islámica de 1979.

Al menos 120.000 personas han muerto por la guerra civil en Siria y casi nueve millones han huido de sus hogares desde que comenzó el conflicto, hace dos años y medio. Pese a los intentos de la comunidad internacional para que haya una transición democrática, Al Assad insiste en mantenerse en el poder. Su familia gobierna Siria desde hace cuatro décadas.