La Iglesia envió su mensaje navideño: "Reciban a Jesús en su corazón"

A través de un video, el arzobispo de Buenos Aires, Mario Poli, llamó a disfrutar la fecha al señalar que "puede convertirse en una fiesta de alegría"

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A través de un video, el arzobispo de Buenos Aires, Mario Poli, llamó a disfrutar la fecha al señalar que "puede convertirse en una fiesta de alegría"
 Charly Diaz Azcué 162
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"Dejalo entrar a Jesús, el hijo de Dios, el va a ser la alegría de tu hogar; recibilo en tu corazón", dijo Poli en su mensaje.


Por otro lado, el arzobispo de Santa Fe y presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, monseñor José María Arancedo, llamó a la "concordia" entre los argentinos y a profundizar la "cultura del encuentro".


"Aspirar a la concordia entre los argentinos como un bien superior a una pertenencia partidaria o ideológica. Esto es posible si todos apostamos con grandeza y responsabilidad a un di logo sincero como base de una cultura del encuentro, de la inclusión y la amistad social", dijo el prelado.


Explicó que "estamos ante un desafío que nos involucra a todos, especialmente a la clase dirigente, y es el de crear las condiciones de una sociedad m s confiable, más honesta y cordial, más justa y solidaria".


"Considero que un camino privilegiado para crear estas condiciones es volver nuestra mirada a esas realidades cercanas y valiosas por su potencial cultural e inclusivo, por ser lugares de aprendizaje y transmisión de valores que hacen a la formación de cada hombre y al desarrollo integral de la sociedad, me refiero a la familia, la escuela, el trabajo y la ejemplaridad", añadió.


Arancedo destinó la parte central de su mensaje a "muchos chicos que viven expuestos a la moderna esclavitud de la marginalidad".


Sostuvo además que el "flagelo de la droga deteriora la vida y el futuro de muchos jóvenes" e instó a combatir el narcotráfico y prevenir y ayudar al adicto.


"Lo vemos en ese número de chicos y de jóvenes que no estudian ni trabajan, y viven expuestos a la moderna esclavitud de la marginalidad. En la inseguridad y la violencia. En la brecha entre ricos y pobres que condiciona un auténtico crecimiento. Estos hechos atentan contra la vida y son signos de nuestra fragilidad", enfatizó.


En tanto, el arzobispo de Corrientes, monseñor Andrés Stanovnik, instó a tener "una convivencia respetuosa entre seres humanos" y a que "aprendamos a cuidarnos entre todos y tratarnos bien".


Stanovnik dijo que "debemos seguir recuperando la confianza en nosotros" y que "la fe se recupera siempre en relación con la otra persona".


"Nos alegramos de que en estos días, transitemos una convivencia en paz en nuestra provincia, eso habla bien de nuestro gobierno provincial, de los gobiernos municipales y de nuestra Policía" y de que es posible "una convivencia seria y responsable", destacó el arzobispo de Corrientes.


Finalmente, afirmó que para lograr este objetivo, "confiamos en el trabajo mancomunado entre la Iglesia y el Estado" y habló además de la colaboración de "diversas organizaciones y de todos".