2015: quiénes lanzan hoy su carrera por la sucesión de Cristina Kirchner

Con los resultados sobre la mesa, el 2013 será enterrado y todas las miradas apuntarán a las presidenciales del 2015. Con ese escenario, hoy varios gobernadores y dirigentes nacionales se lanzarán a la carrera por el sillón de Rivadavia.

Con la chance de una reforma constitucional casi nula, el kirchnerismo arranca hoy mismo la pelea por la sucesión y la nueva entronización en el principal lugar del peronismo. Los caudillos provinciales ya juegan su juego, buscando padrinazgos en Balcarce 50. En la oposición, radicales y peronistas disidentes buscarán ganarse el lugar. En la política, las costillas se cuentan con elecciones ganadas. Sin 2013 no hay 2015, y eso se define ahora.

En Chaco, Jorge Capitanich tratará de ofrendar una victoria sin miramientos para el oficialismo, aunque no la tiene nada fácil. En las primarias, Capitanich no estuvo exento de la baja de votos del arco del kirchnerismo y su candidatura testimonial se vio oscurecida por una campaña complicada. Su lista ganó solo por seis puntos de diferencia a los candidatos del radicalismo, liderados por el ex gobernador, Ángel Rozas. No fue una buena elección para un patrón acostumbrado a ganar por más de 10 puntos de diferencia. Capitanich, candidato a senador, es uno de los pocos que decidieron encabezar la lista de legisladores. 

Nunca sinceró sus aspiraciones presidenciales, pero es un nombre puesto para ocupar la parrilla de candidatos. "Cada dos años tenemos un plebiscito popular. Guste o no, tenemos que asumir la responsabilidad de nuestro liderazgo. En muchos casos, tenemos que asumir la responsabilidad directa de ese liderazgo, y en ese contexto las elecciones de 2013 ameritan esa responsabilidad", sostuvo el gobernador K que terminará su mandato en 2015 y no podrá volver a ser candidato a la gobernación. Capitanich todavía no aseguró si asumirá su banca, pero todo indica que pedirá licencia en la Cámara alta y asumirá su cargo luego de dejar la gobernación. Sabe que la gobernación es una gran vidriera para avanzar en una campaña nacional o en una eventual interna del peronismo.

En Entre Ríos aparece otro candidato a ponerse la banda. Sergio "Pato" Urribarri se sumó a último momento, pero pide que no lo dejen afuera. Cuenta con el apoyo del secretario de Legal y Técnica, Carlos Zannini, no tiene problemas en su provincia y está decidido a levantar el perfil. Tiene un escollo por superar: sólo lo conoce el 7% de la población nacional. Urribarri aparece como una apuesta del kirchnerismo duro para evitar dejarle el camino libre al gobernador bonaerense, Daniel Scioli. La lista de Urribarri le sacó 20 puntos de diferencia a la segunda fuerza y puede robarle una sonrisa al gobierno nacional: debe lograr que el candidato del PRO, el ruralista Alfredo de Angeli, no ingrese al Senado de la Nación. El gobernador entrerriano sonó en las últimas horas como un posible reemplazante del jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina.

En Salta, Juan Manuel Urtubey es al que todos miran con recelo. Es el amo y señor de su provincia, es joven carismático y aún le queda la posibilidad de ir por un mandato más. Urtubey es otro de los nombres asegurados para una carrera presidencial. Él no sincera sus deseos, pero por lo bajo no tiene dudas. Los temores en el kirchnerismo se dan por dos claves: no es kirchnerista ortodoxo y tiene una gran relación con el intendente de Tigre, Sergio Massa. El salteño da señales de independencia y eso no gusta en la Rosada, pero saben, al mismo tiempo, que lo deben tener en cuenta para la sucesión.

El gobernador de Córdoba, José Manuel de la Sota, sabe que es el último cartucho que le queda y no lo va a dejar pasar tan fácil. Es el único gobernador antikirchnerista con chances ciertas de poder acomodarse en una carrera presidencial. Para dar el primer paso con fuerza, su candidato, el ex gobernador, Juan Schiaretti, deberá imponerse sin dudas frente a los candidatos del kirchnerismo. De la Sota es mirado con deseos dentro del peronismo anti-k como un jugador clave en la operación de una alternativa nacional.

El último gobernador y el principal es Daniel Scioli. El hombre de La Ñata ya habla como presidenciable y busca ser ungido con la marca de la Presidente. ¿Sus contras? La falta de confiabilidad que le pregona el kirchnerismo duro y la competencia de Sergio Massa en su propio territorio. ¿Podrá Scioli escapar de la derrota de Martín Insaurralde? Seguramente. En el sciolismo ya piden internas en el peronismo y se apuntalan como la sucesión. Es el gobernador con imagen más positiva.

Fuera del esquema de gobernadores aparecen Julio Cobos en Mendoza, Sergio Massa en la provincia de Buenos Aires y Hermes Binner en Santa Fe. Todos disfrutarán hoy de diferentes victorias para posicionarse en el armado nacional. Ganar la provincia de Buenos Aires y correr al kirchnerismo es una ficha que no todos pueden ostentar. Massa la tiene. Apuesta a lograr apoyo dentro del peronismo y lograr pases de figuras del kirchnerismo. No cerró la puerta a posibles acuerdos con el radicalismo y otras fuerzas. Tiene el apoyo de los empresarios, pero un problema: mantener una candidatura dos años y medio.

El último en el lugar de los presidenciables es el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri. El jefe del PRO carece de armado nacional, pero su nombre mide. Tiene un gran nivel de conocimiento y es una figurita deseada por varios espacios. Ya todos piensan en 2015.