Barricadas contra la Copa Confederaciones

Unas 400 personas incendiaron neumáticos sobre la avenida que da acceso al estadio Mané Garrincha de Brasilia para protestar contra el desmesurado gasto público en obras para realizar la Copa Confederaciones y las expropiaciones en varias de las seis ciudades sedes. Brasil vive un momento de tensión por diversos reclamos en sus principales urbes.

La acción fue comandada por el Comité Popular de la Copa del Mundo, que reclama que inversiones similares a la de la reforma del estadio, 500 millones de dólares, sean destinadas a viviendas reivindicadas por el Movimiento de Trabajadores Sin Techo.

Durante el jueves, miles de personas salieron a las calles de San Pablo y Río de Janeiro en repudio al aumento de los precios del transporte público y culminó con un saldo de casi 400 detenidos, aunque la mayoría ya ha sido puesta en libertad.

El ministro brasileño de Deportes, Aldo Rebelo, consideró que las manifestaciones que se están desarrollando en los últimos días no afectarán el desarrollo de la Copa. "Creo que la (Copa) Confederaciones se desarrollará sin ninguna relación directa con las manifestaciones que tengan lugar en el país", dijo Rebelo.

Sin embargo, el secretario de Seguridad de Brasilia, Sandro Avelar, afirmó que no tolerará manifestaciones durante la ceremonia inaugural. "Actuaremos con el rigor necesario para que sea un día de paz. El mundo nos observa. Detenciones, si deben ser realizadas, serán realizadas", dijo Avelar, según informó la cadena Globo.