Más indicios de la presencia de Hezbollah en la región

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 Reuters 163
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En los últimos meses se acumularon los casos de militantes de la organización terrorista detenidos o investigados por las fuerzas de seguridad de los países latinoamericanos

El último caso fue la detención de Hamzi Ahmad Barakat, un comerciante libanés acusado de ser uno de los principales financistas de Hezbollah en Curitiba, en la Triple Frontera entre Brasil, Argentina y Paraguay.

Las autoridades identificaron a sus cómplices, todos ellos libaneses, pero se encuentran prófugos.

Barakat está acusado de liderar una banda que llegó a perpetrar una estafa superior a los 4 millones de dólares traficando prendas de vestir que obtenía de grandes empresas textiles, en algunos casos haciéndolas quebrar.

Según el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos, el líder de la banda es un personaje clave para Hezbollah en el Área de la Triple Frontera. Las autoridades estadounidenses lo investigan por tráfico de drogas, armas y explosivos.

Además es el dueño de Casa Hamze, una tienda en la Galería Page, un centro comercial ubicado en la Triple Frontera en el que trabajaron numerosos miembros de Hezbollah y que de hecho fue fuente de fondos para la organización.

El hermano de Barakat, Assad, viene siendo investigado desde 2006 por los organismos de seguridad de Estados Unidos porque era socio de Hamzi.

"La red de Assad Ahmad Barakat es una de las mayores arterias financieras hacia Hezbollah en el Líbano", sostuvo recientemente Adam Szubin, Director de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC).

Entre los investigados también se destaca Muhammad Yusif Abdallah, uno de los líderes y recaudador de Hezbollah en el Área de la Triple Frontera. Se sospecha que viaja continuamente a El Líbano para mantener conexiones con la jerarquía de la organización.

Abdallah, que es además el dueño de la Galería Page, estuvo involucrado en causas de contrabando de dispositivos electrónicos, falsificación de pasaportes, fraude con tarjetas de crédito, y venta de dólares falsificados.

A estos procedimientos en la zona se suman diversas detenciones de otras personas con fuertes vínculos con Hezbollah realizadas en 2012 por las fuerzas de seguridad locales, y el trascendido de un informe de inteligencia que daba cuenta de la amenaza creciente de que hubiera un atentado terrorista en la región.