Silicon Valley también necesita la reforma migratoria

Las empresas de tecnología se unen a los sectores agropecuario y de servicios. Todos necesitan extranjeros

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 AFP 163
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Según un artículo publicado por The Wall Street Journal, no sólo las empresas que fabrican chips y necesitan ingenieros o expertos en matemática o los granjeros que necesitan trabajadores que recojan las naranjas que nadie quiere recolectar reclaman una modernización de las políticas migratorias. También varias industrias y, según algunos cuantos, la economía en general necesitan que las reglas cambien para que los EEUU puedan competir con el resto del mundo.

El martes, el presidente Barack Obama urgió al Congreso a que use el impulso bipartidista detrás de la cuestión migratoria para aprobar la reforma rápidamente. Por primera vez en años, los republicanos y los demócratas parecen estar listos para resolver el problema juntos, señaló Obama.

Los EEUU podrían retener a los estudiante universitarios en el país para crear nuevos empleos, nuevas compañías y, en algunos casos, nuevas industrias, dijo John Feinblatt, presidente de Partnership for a New American Economy, una grupo bipartidista de alcades y líderes empresariales de todos los sectores de la economía.

"Debemos enfrentar el hecho de que otros países están desenrollando la alfombra roja para recibir trabajadores y nosotros no", dijo Feinblatt. Las leyes que limitan el número de empleados cualificados que pueden trabajar en los EEUU son un obstáculo para que algunas compañías puedan crecer, en especial las tecnológicas, y el país no aprovecha la onda expansiva que se generaría en la economía, según Feinblatt.

Partnership for a New American Economy, que incluye entre sus miembros a Steve Ballmer (CEO de Microsoft) y Rupert Murdock (CEO de News Corp.), estudió el problema junto con el conservador American Enterprise Institute.

Uno de los hallazgos de la investigación indica que por cada estudiante nacido en el extranjero con un diploma de posgrado al que se le permite trabajar en los EEUU, se crean 2,62 puestos de trabajo más. Pero ese tipo de crecimiento se ve obstaculizado por el límite arbitrario de 65.000 visas H1-B al año. Las h1-B son visas que permiten que las empresas contraten trabajadores extranjeros en puestos que requiere especialización.

En los sectores de tecnología, servicios, agricultura y construcción, no se debate sobre la viabilidad de la reforma migratoria y no hay ningún tipo de discusión sobre si se deberían dar una autorización de residencia (Green Card). Algunas compañías necesitan toda la ayuda que puedan conseguir y no les importa cuál es el origen de los trabajadores.

El gigante de los chips Intel Corp. trata de obtener la mayor cantidad de visas H1-B que puede cuando tiene la posibilidad de solicitarlas, en abril, pero su suerte varía de año en año, de acuerdo con Lisa Malloy, vocera de la compañía.

Según Malloy, Intel trata de contratar ciudadanos estadounidenses pero ha encontrado que hay una "brecha de capacidades" entre aquellos educados en los EEUU y los que estudiaron afuera. Alrededor del 6% del total de trabajadores en los EEUU son graduados extranjeros que tienen visa.

Intel espera que el Congreso y el presidente Obama puedan satisfacer las cambiantes necesidades de la compañía cuando o si aprueban algún tipo de reforma migratoria. Y no es la única.