La industria porno resiste el uso del preservativo

La "Medida B" impone el uso de preservativo en todos los rodajes de películas pornográficas en el condado de Los Ángeles, que concentra a la mayor parte de la industria. La iniciativa fue impulsada por la fundación AIDS Healthcare.

La nueva norma obligará a todos los productores de filmes para adultos obtener un permiso de rodaje con la aprobación de los servicios de salud californianos. Además, se realizarán controles regulares e imprevistos en las filmaciones para certificar que los actores trabajan con preservativos.

Los opositores a la medida anunciaron en un comunicado sus intenciones de "bloquear ante los tribunales la aplicación del texto" y pedirán a las autoridades del condado "suspender la medida en tanto que la justicia no se pronuncie".

Diane Duke, directora de la Coalición por la Libre Expresión (FSC) que reúne a gran parte de los productores porno, envió un correo a las autoridades de Los Ángeles para quejarse de la ley "insostenible para la industria".

"Además de los costos evidentes y excesivos que se derivan de la aplicación de la ley, la FSC y la industria tienen muchas inquietudes sobre la ley misma, que juzgamos anticonstitucional", según DUKe.

En tanto, el FSC amenazó con cambiar la localización de sus producciones hacia condados más "acogedores", donde no se restringe la pornografía -que factura mil millones de dólares  y representa 10 mil empleos-.

En 2011, la realización de películas porno se detuvo provisionalmente luego que un actor diera positivo en las pruebas del sida.