En Brasil, todos quieren una foto con Lula

El ex presidente de Brasil es una figura casi omnipresente en la campaña de cara a las elecciones municipales. Hasta candidatos rivales se presentan como sus ahijados políticos

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 AP 163
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El ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva parece que estuviera en todas partes. Candidatos a alcalde en las elecciones municipales de octubre lo presentan en todo el país como su padrino, con la esperanza que recibir un impulso a sus aspiraciones de la figura más popular de la política brasileña para los comicios del 7 de octubre.

La imagen de Lula se convirtió esta semana con el inicio de la campaña electoral en un tesoro para candidatos de la base oficialista, en especial para el gobernante Partido de los Trabajadores (PT), pese a que el ex mandatario de 66 años viene saliendo de un desgastante tratamiento contra el cáncer, del cual salió curado.

      

Lula concluyó ocho años en la presidencia de Brasil el 31 de diciembre de 2010 con índices de

, después de contribuir con la elección de la actual presidenta,

, a quien él mismo escogió como aspirante a sucederlo pese a no tener experiencia electoral. El PT espera que Lula pueda repetir esa magia en las elecciones de octubre, y contar además con el concurso de Rousseff, quien también goza de índices de aprobación de más de 70%.

El presidente del PT, Rui Falcao, explicó en un reciente diálogo con corresponsales extranjeros que la agrupación pretende aprovechar el enorme prestigio de Lula con su presencia física en las contiendas más importantes, y mensajes grabados en otras localidades.

Todos lo quieren cerca

Los comicios se realizarán en los 5.565 municipios de todo el país y son vistas como una prueba de fuerza de las diferentes tendencias políticas de cara a las elecciones de gobernador y presidente en 2014. La pregunta es cuánto peso tiene una figura de proyección nacional, como Lula, en una contienda donde pesan más las cuestiones de índole local.

      

Para la analista política Helcimara Telles, de la Universidad Federal de Minas Gerais, el peso del ex presidente será reducido. Según dijo, Lula tuvo poco impacto en las elecciones municipales de 2008, donde apoyó a varios candidatos del PT y partidos aliados, porque incluso los aspirantes opositores se presentaban como aliados del entonces mandatario.

"En las elecciones de 2008 estudiamos mucho la votación en varias capitales y lo que percibimos es que la presencia de Lula tuvo poco peso en la decisión del voto porque los candidatos en general se posicionaron como aliados del gobierno federal. Si todos apoyan a Lula, eso deja de ser un factor que distingue a los candidatos", explicó a la agencia AP.

Un fenómeno de ese tipo se dio en la ciudad de Belo Horizonte, una de las más grandes del país, donde el ex ministro del gobierno de Lula, Patrus Ananias, aspira a la alcaldía por el PT como opositor al actual alcalde, Marcio Lacerda.

      

El problema es que Lacerda, ampliamente favorito en las encuestas, ganó su primera elección en 2008 con el apoyo de Lula, al tiempo que su Partido Socialista Brasileño es aliado del Gobierno de Rousseff. Aunque Lula grabó mensajes de apoyo a Ananias, Lacerda también se presenta como candidato allegado al gobierno federal.

Desde finales de agosto Lula tendrá mayor presencia en las elecciones, comenzando con una visita a Belo Horizonte y ciudades vecinas, y en septiembre hará su primer acto de campaña en San Pablo, la ciudad más grande del país, donde presionó para lanzar a un candidato sin experiencia, su ex ministro de Educación Fernando Haddad.

Rezagado en las encuestas frente al ex gobernador y ex candidato presidencial José Serra, Haddad espera que una presencia sólida de Lula en su campaña lo catapulte a la cima de las intenciones de voto. El ex mandatario ya apareció el miércoles en un anuncio de televisión de apoyo a Haddad y ataque a Serra, de quien dijo "no sé por qué es candidato otra vez, tal vez sea para perder". Serra perdió dos campañas presidenciales, una frente a Lula en 2002 y la otra frente a Rousseff en 2010.

Otro candidato en lucha contra encuestas adversas, Nelson Pelegrino, aspirante a la alcaldía de la ciudad nororiental de Salvador, presentó un comercial con dibujos animados en que aparece junto a Lula y Rousseff bailando música axé, típica de la región, mientras una voz canta "Pelegrino es del equipo de Lula".