Cuando Bill Gates rechazó el libro electrónico

El magnate de Microsoft pudo lanzar el primer e-book del mundo, pero lo rechazó porque el prototipo "no se parecía a Windows"

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 AP 163
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Gates es un referente en el mundo de la tecnología, aunque su legado sea motivo de riña entre fanáticos y detractores. Pero, en 1998, cuando le ofrecieron el prototipo del primer libro electrónico, no se dio cuenta de que tenía en sus manos el futuro de la lectura.

"No se parece a lo que hacemos en Windows", dictaminó y vetó la propuesta para que Microsoft comenzara a desarrollarlos y comercializarlos. Al parecer, en esa misma ocasión, también dijo que un dispositivo con pantalla táctil no sería atractivo para los usuarios.

Eso se desprende de la declaración de Kurt Eichenwald -un desarrollador que trabajó cara a cara con Gates- que fue entrevistado por la revista Vanity Fair para el artículo La década perdida de Microsoft.

El empresario rechazó así el primer e-reader. Al poco tiempo, salían los modelos Softbook, de la compañía de igual nombre, y Rocket eBook de NuvoMedia. Eran la piedra fundadora de una tendencia que se consolida día a día.

Hoy hay cientos de soportes para libros electrónicos, entre los que se destacan el Kindle de Amazon o el lector de Barnes&Noble. También cada vez se digitalizan más textos y el catálogo online, sin problemas de reedición, empieza a superar la oferta del papel.

Hasta la misma firma de Microsoft decidió entrar -tarde, hace tan solo unos días- en el mercado de las tabletas con Surface. Si bien las tablets no igualan en calidad a un lector electrónico, también sirven de soporte de lectura.