Aseguran que los hongos alucinógenos podrían ayudar a enfermos mentales

La psilocibina, su componente principal, es ilegal y se considera una sustancia de la Lista 1 de EEUU, junto con la heroína y el LSD. Según un estudio reciente, colaboraría en el tratamiento de la ansiedad y la depresión

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El ingrediente clave de los hongos alucinógenos podría hacer "magia" con ciertos desórdenes mentales, según revelan varios estudios. Pero, de momento, existe poco conocimiento científico sobre lo que sucede en el cerebro cuando las personas están bajo sus efectos, según una nota que publica CNN México en su página web.

En tal sentido, una investigación publicada en la revista científica Proceedings of the National Academy of Science brinda mayor información sobre por qué la psilocibina podría ser prometedora para el tratamiento contra la depresión.

"Encontramos que estas sustancias apagan ciertas partes del cerebro que integran las sensaciones -la visión, el sistema auditivo y el tacto- con el pensamiento", sostuvo el médico David Nutt, autor principal del estudio e investigador del Imperial College de Londres en Gran Bretaña.

La psilocibina es considerada una sustancia  ilegal en los Estados Unidos y se encuentra incluida en la Lista 1 de este país, junto con la heroína y el LSD. Las sustancias comprendidas en esa nómina "tienen un alto potencial de abuso y no tienen un uso médico legítimo en los Estados Unidos", de acuerdo con el Departamento de Justicia.

No obstante, las primeras etapas de la investigación revelaron su potencial uso en la medicina, ya que se demostró que es útil para los pacientes con cáncer terminal que padecen ansiedad y parece prometedora para tratar la depresión.

En el estudio, se encontró que cuando la psilocibina apaga más al cerebro, es mayor la sensación de encontrarse en un estado alterado de la conciencia. "No es lo mismo que soñar, porque estás plenamente consciente y te das cuentas de las cosas", sostuvo Nutt.

El estudioso agregó que la corteza prefrontal medial, la parte frontal en la mitad del cerebro, parece ser crucial, ya que determina cómo piensas, sientes y te comportas. Los daños en esa zona producen cambios profundos en la personalidad, así que si lo apagas, tu sentido de ser se fragmenta. Eso es lo que sucede cuando disminuye la actividad de la psilocibina.

"Algunas personas pueden convertirse en uno con el universo", dice. "Es una especie de experiencia transcendental".

A pesar de que los científicos encontraron muchos efectos positivos de la psilocibina en las pruebas experimentales, hay peligros potenciales -la gente puede dañarse a sí misma o puede saltar de una ventana por una reacción de pánico-, así que tendría que ser administrada en un entorno controlado en un hospital.

"Las personas afirman que aumenta su sensación de sí mismas, un mayor equilibrio emocional, son más compasivos, son más sensibles a las necesidades de los demás", asegura Roland Griffiths, profesor de Psiquiatría y Neurología en la Escuela de Medicina John Hopkins, quien no participó del estudio pero investiga esta sustancia. "Tienen mayor bienestar y menos depresión, pero no están drogados en el sentido convencional: sienten que su enfoque de percepción cambió".