Aprobó el miércoles una legislación que podría expandir los castigos vigentes, llenando algunos vacíos en las resoluciones ya existentes en sectores como energía y finanzas. Algunos senadores de los dos partidos también están trabajando en extender las penes a Teherán, el quinto mayor exportador mundial de petróleo, por los temores de que está desarrollando una bomba nuclear.
La Cámara aprobó una ley que podría expandir las sanciones a compañías involucradas en la industria petrolera, incluyendo inversiones, venta de bienes o servicios iraníes usados en refinerías, o el dar a la república islámica productos refinados por más de 5 millones de dólares al año. También podría llevar a castigos sobre el desarrollo de infraestructura o puertos, así como la compra de deuda soberana iraní.
En tanto, la Cámara aprobó una ley que incluye una provisión que podría imponer sanciones a instituciones financieras que hagan negocios con el banco central iraní.
Además, la cámara votó a favor de un proyecto para sancionar a empresas o países que ayuden a Irán, Corea del Norte o Siria en la búsqueda de armas nucleares, químicas o biológicas o el desarrollo de programas misilísticos. Bajo esta ley, incluso entidades que vendan bienes o tecnología militar a esos países sufrirán el congelamiento de sus bienes en Estados Unidos.