Tras despedirse de sus esposas y familiares, una tripulación, conformada por tres rusos, un chino, un francés y un ítalo-colombiano, ingresó a los módulos en donde vivirán por 520 días, hasta noviembre de 2011, parte de un experimento que busca probar cómo afecta el aislamiento a las personas.
"Tantos experimentos deben hacerse por primera vez y eso es lo que estamos haciendo para Marte", explicó Anatoly Grigoriev, vicepresidente de la Academia de las Ciencias de Rusia, antes de que la tripulación "partiera".
Sin embargo, la Agencia Espacial Europea (AEE) declaró que pasarían al menos 30 años antes de que los humanos puedan llegar al planeta rojo, y agregó que el viaje de ida tomaría cerca de nueve meses.
A diferencia de lo que ocurriría en un viaje real, los tripulantes sí tendrán gravedad y no estarán expuestos a la radiación. Pero al igual que en una misión verdadera, los participantes no pueden beber alcohol o respirar aire puro.
Además, los vegetales que ingieran deberán ser cultivados a bordo, y el único contacto con la Tierra será a través de correos electrónicos con un desfasaje de 40 minutos.
El año pasado, cuatro rusos, un alemán y un francés completaron con éxito la simulación de un viaje espacial de 105 días realizada en el mismo instituto.