Duras críticas a la expropiación de la cadena de supermercados Éxito

Luego de que el caudillo caribeño Hugo Chávez anunciara este domingo que tomará el control de la cadena francesa de hipermercados Éxito, supermercadistas y empleados del grupo salieron a repudiar la medida.
El segundo vicepresidente de la mayor cámara de empresarios del país, Tulio Hidalgo, rechazó la expropiación de los seis hipermercados y afirmó que la medida no sólo afecta a los trabajadores y propietarios de la empresa, sino también a la cadena de suministros del sector de alimentos.

Hidalgo dijo al canal de noticias Globovisión que la decisión tendrá una incidencia "negativa para todos los que de alguna forma están participando en esta actividad empresarial".

Bajo la consigna "y no, y no, nos quitarán el derecho a trabajar" varias decenas de empleados de la cadena de hipermercados Exito se concentraron el lunes a las puertas de la sede capitalina del grupo para expresar su rechazo al anuncio de expropiación.

"Estamos manifestando por el derecho al trabajo y no a la expropiación", afirmó José Berrios, un analista de comunicaciones de la cadena. Agregó que con la expropiación el gobierno lo que busca es "asustar a la población, a los empresarios pequeños".
Las tiendas Exito y CADA forman parte de la corporación Cadena de Tiendas Venezolanas (Cativen) que tiene como accionista mayoritario al grupo francés Casino, y donde también mantiene una participación el conglomerado colombiano almacenes Exito y el grupo local Empresas Polar.

Cativen dijo el lunes en un comunicado que sus operaciones administrativas y comerciales "se mantienen con absoluta normalidad" y que están a la espera de instrucciones de su casa matriz en Francia.

El anuncio de expropiación tiene lugar pocos días después que Chávez amenazó con confiscar a las empresas que eleven los precios tras la devaluación de 64% en promedio que sufrió el bolívar fuerte frente al dólar la semana pasada.

El mandatario anunció el 8 de enero la eliminación de la tasa de cambio 2,15 bolívares fuertes por dólar vigente desde el 2005 y estableció las paridades de 2,60 bolívares fuertes por dólar para transacciones consideradas prioritarias por el gobierno y 4,30 bolívares por dólar para diversas actividades, así como regulaciones especiales para intervenir en el mercado paralelo.

En intento por evitar que la devaluación genere una escalada de la inflación, el gobernante ordenó el 11 de enero a las autoridades y militares intervenir las tiendas que eleven precios. Como parte de ese proceso fueron cerrados por 24 horas varios centenares de comercios en todo el país la semana pasada.