La Justicia falló contra la Ciudad por un vecino que se lesionó al tropezar y caer en la calle
, cuestión que
deja en claro que el frentista no siempre tiene la obligación de arreglar la vereda, aunque en términos generales así se considere.
Osorio Blanco salió de su casa
temprano rumbo al trabajo y al llegar a
Martín de Gainza 78, barrio de Caballito, se tropezó con la raíz de un árbol que rompía la vereda y se cayó al piso. El accidente le provocó una fractura de cadera y lo dejó sin trabajar durante varios meses
.
La Justicia condenó al gobierno de la Ciudad a indemnizarlo por el mal estado de la vereda y rechazó la demanda contra el frentista
.
Tras la condena en primera instancia,
el gobierno de la Ciudad apeló
por entender que la obligación de mantener y conservar las veredas en buen estado le corresponde a los frentistas
y además, sus abogados destacaron que el consorcio involucrado nunca había reclamado la reparación
,
según informa el diario
Clarín.
Sin embargo,
el tribunal confirmó la condena por $36 mil más intereses
.