El Papa Benedicto XVI dijo el domingo que sólo los puros de corazón pueden
recibir la Comunión. Esto sucedió un día después de que Silvio Berlusconi bromeara con que el Sacramento debería extenderse a quienes se divorciaron y se volvieron a casar.
Los diarios italianos habían reportado que el primer ministro italiano, que asistía a una ceremonia en Cerdeña, preguntó a un obispo que ofrecía la Comunión cuándo planeaba la iglesia cambiar las reglas para gente que se vuelve a casar después del divorcio, quienes tienen prohibido recibirla.
"Debería dirigirse a un poder superior a mí", replicó el sacerdote.
El Papa, en un mensaje a una conferencia en Quebec, no mencionó a Berlusconi ni al divorcio, pero dijo que la Comunión sólo podía ser dada a los que estaban libres de pecados importantes.
"Tenemos que hacer todo lo que esté en nuestro poder para recibir (la Comunión) con un corazón puro, buscando sin fin, mediante el sacramento del perdón, la pureza que el pecado ha manchado", dijo en su mensaje el Papa Benedicto XVI.
"Por otro lado, los que no pueden tomar la Comunión debido a su situación hallarán, no obstante, en el deseo de participar en la eucaristía, la fuerza y el efecto de la salvación", añadió.
Berlusconi es divorciado y casado en segundas nupcias.