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Luego de más de cuatro horas de pura emoción, David Nalbandian derrotó al sueco Robin Söderling por 6-4, 1-6, 4-6, 6-4 y 9-7 y clasificó a Argentina a las semifinales de la Copa Davis.
"La verdad que sí, fue muy emocionante jugar acá con toda la gente. Hoy dejé todo, corrí a morir, por suerte se dio y por eso al final no pude contener el llanto, me expresé así", declaró el cordobés, quien rompió en llanto tras el punto final.
El cordobés, sobrecargado anímicamente al estar dos sets abajo y luego, tras revertir esa situación, dejar escapar cuatro match points, admitió que el apoyo del público argentino fue clave para quebrar al sueco Söderling, quien por momentos parecía no verse afectado en lo más mínimo por el entorno.
"Dejé todo dentro de la cancha, a pesar de que estaba mal de una pierna, pero la gente merecía el esfuerzo y por eso no me guardé nada", añadió Nalbandian, quien también había sido el que resolvió la serie anterior, en febrero pasado, ante Gran Bretaña, un rival claro está más sencillo.
El líder del equipo argentino se refirió, en medio de abrazos con sus compañeros de equipo y firmas de autógrafos al público, al próximo rival en la Davis, que será nada menos que Rusia, entre el 19 y 21 de septiembre próximos, otra vez en el Parque Roca.
"Estoy contento de volver a jugar acá, eso era lo que pretendíamos. Contra Rusia vamos a necesitar a la gente mucho más, va a estar bueno", vaticinó Nalbandian, héroe argentino en la Davis y principal argumento del equipo que pretende ganar por primera vez el torneo.
En un partido que sirvió para presentar ante el público argentino a Juan Mónaco como integrante del equipo de Copa Davis, el tandilense doblegó a Thomas Johnasson por un doble 6-3 en una hora y cinco minutos de juego y cerró la serie por 4-1 a favor del elenco local.
Se viene Rusia
"Es un rival durísimo por más que juguemos acá, en casa", analizó Alberto Mancini, también emocionado por el triunfo de David. "Creo que es un año en el que se están dando las cosas", agregó el capitán. La otra semifinal la jugarán España y Estados Unidos, que vencieron a Alemania y Francia, respectivamente.