Atacaron el santuario del "Potro" Rodrigo

Ocurrió el fin de semana pasado, cuando un grupo de vándalos ingresó al lugar situado al costado de la autopista Buenos Aires-La Plata. Se llevaron las ofrendas de los seguidores del fallecido cantante

Compartir
Compartir articulo
  162
162

Un grupo de vándalos destrozó el altar levantado en memoria del cantante bailantero Rodrigo "El Potro" Bueno, situado al costado de la autopista Buenos Aires-La Plata, tras lo cual el lugar fue incendiado.

El episodio se registro el pasado fin de semana cuando varios delincuentes ingresaron al santuario ubicado en las inmediaciones del kilómetro 25 de la mencionada autopista, a la altura de la localidad bonaerense de Berazategui, y rompieron todo lo que tenían a su alrededor.

Luego de destruir todas las ofrendas que los fanáticos le llevaron al cantante fallecido trágicamente el 24 de junio de 2000, los vándalos prendieron fuego el lugar utilizando varios litros de combustible, según indicó el sitio web Primiciasya.com.

Esta no es la primera vez que el santuario del "Potro" sufre ataques, ya que el 25 de julio de 2003 el lugar fue incendiado intencionalmente por un grupo de desconocidos que quemaron la estatua y las ofrendas dejadas allí en honor al cantante cuartetero.

Rodrigo murió trágicamente cuando su camioneta volcó al chocar contra el guardarrail de la autopista, presuntamente luego de impactar con otro vehículo.

Desde que se produjo la muerte del popular cantante, sus seguidores decidieron crearle un monumento al costado de la autopista donde se produjo el fatal accidente que le costó la vida.

Allí se formó una especie de santuario donde se levantaron cruces, se prendieron velas, se colgaron banderas, pósters y todo tipo de ofrendas.

La iniciativa del santuario surgió por la Municipilidad de Berazategui, algunos días después de la tragedia, y hasta la empresa concesionaria de la autopista Buenos Aires-La Plata abrió una calle lateral para que los fans pudieran llegar.

Además, cada 24 de junio miles de fan ticos del cordobés se hacen presentes en ese lugar para recordarlo cantando sus canciones, el legado que le dejó a todos los cuarteteros.