Retirarán 4 millones de baterías SONY instaladas en notebooks Dell

La empresa Dell registró al menos seis casos donde sus laptops se prendieron fuego a raíz del sobrecalentamiento de las baterías que la empresa Sony fabricó. Las imágenes de una máquina cuando se incendiaba

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Dell Inc. dijo el lunes que retirará de la venta 4,1 millones de baterías para computadoras portátiles porque pueden recalentarse hasta provocar fuego.

Un vocero de Dell dijo que las baterías fueron fabricadas por Sony e incluidas en computadoras que salieron a la venta entre el 1 de abril de 2004 y el 18 de julio de este año, indica la agencia de noticias AP.

"En casos excepcionales, un cortocircuito puede provocar el recalentamiento de la batería, causando peligro de humo y/o fuego", dijo el vocero Ira Williams. "Sucede en pocos casos, pero optamos por tomar esta medida inmediatamente".

Las baterías corresponden a modelos Latitude, Inspiron XTS y computadoras móviles de precisión. Dell lanzó una página en Internet con el objeto de explicarle a los clientes cómo obtener una batería de reemplazo de forma gratuita: www.dellbatteryprogram.com.

Si bien se cree que la mayoría de estas pilas fueron instaladas en computadoras vendidas en los Estados Unidos, se cree que más de un millón estarían fuera de esa nación. Scott Wolfson es vocero de la Comisión de Seguridad del Consumidor (Consumer Product Safety Commission) e indicó que, ahora, los usuarios de los aparatos afectados deberán enchufar sus laptops a las tomas de corriente.

Recientemente se había informado sobre casos de computadoras Dell que estallaban en llamas, y fotos de los aparatos chamuscados han circulado por Internet.

El incidente más conocido se produjo durante una conferencia en junio en Osaka (Japón), cuando se recalentaron excesivamente las baterías de un portátil que, afortunadamente, estaba encima de una mesa y no en el regazo de su propietario. (Ver más imágenes)

La cuestión habría pasado desapercibida si no fuera porque la revista electrónica "The Inquirer" publicó unas vistosas fotos de la máquina en llamas y, tras el escepticismo inicial (hubo quien pensó que se trataba de una broma) otras bitácoras como Realtechnews.com o Consumerist.com siguieron sus pasos.

La cosa se puso más seria cuando se tuvo noticia de un segundo incidente, esta vez en Pensilvania, un suceso que llamó la atención de Cindy Shaw, analista de la firma Moors & Cabot.